Muchas gracias.
Quiero, en primer lugar, agradecer la presencia del gobernador constitucional del estado de Puebla, Luis Miguel Jerónimo Barbosa Huerta.
He conocido en la historia del Parlamento, a muchos legisladores, prácticamente en el Parlamento he estado, cumplidos estos tres años, 27 años de legislador federal. Pero en ese reconocimiento, destaco la labor del ahora gobernador Luis Miguel Barbosa.
Les confieso que nunca me quise enfrentar con él en debates jurídicos ni políticos, porque era muy acucioso, es muy acucioso y muy buen parlamentario.
Como diputado federal, fue un hombre que impulsó las primeras iniciativas de la Ley de Transparencia, y para conocimiento de muchos poblanos, sé que ya lo saben, fue el diputado que más ocasiones participó en la Tribuna, de los 500 fue el que más participó en esa ocasión.
Ahora que venimos a presentar esta obra, me acompaña señor gobernador, un grupo de cerca, un poco más de 20 senadoras y senadores de distintos partidos, y de distintos estados, y un grupo de diputados federales también, que honran con su presencia.
Pero ahora que llego a la ciudad de Puebla, me dio mucho gusto que va a ser el primer estado que abrirá todo por la pandemia, con los cuidados, pero es el primer estado que eliminará las restricciones y prohibiciones para que volvamos a retomar nuestra actividad cotidiana, y eso reactivará la economía, el empleo y la convivencia.
Como él dijo hace un rato, sin olvidar las restricciones sanitarias, es lo más conveniente.
También, llego a un estado, y lo digo sin afán de excederme, pero es un estado que frente al resto del país, de los 15 gobiernos estatales que van a asumir nuevos gobernadores y gobernadoras, 13 estados están en bancarrota, 13; sólo dos estados están en condiciones de enfrentar los retos del presente.
Pero Puebla, ha sido desde mi punto de vista, gobernado con eficacia y con talento. Me he dado cuenta de la inversión en el campo, sin precedente; más de mil millones de pesos.
La inversión en infraestructura; carreteras, caminos; la inversión en salud, que le ha reconocido el Gobierno Federal. La inversión en seguridad, que es impresionante.
Por eso felicidades, gobernador, y deseo que Puebla siga en el camino del sendero de esta actitud de un buen gobierno.
Hoy me toca aquí en Puebla, presentar esta obra de dos tomos. Es una obra que para mí, valga la expresión halago en boca propia es vituperio; debería de consultarse y revisarse.
En el 2018, dimos un giro histórico a la vida y rumbo del país, por primera vez, un movimiento progresista de izquierda llegó a la Presidencia, con un respaldo ciudadano sin precedente y obtuvo la mayoría en el Congreso federal.
Un año después, aquí, como bien decía Álvaro, los poblanos después de tiempos complejos optaron por un cambio verdadero, gracias al trabajo y la perseverancia del ahora gobernador Miguel Barbosa.
Hemos instalado, desde ese entonces, el nuevo gobierno, ya no de las clases políticas privilegiadas, sino del pueblo de México.
Desde el ascenso de nuestro movimiento nacional, quienes formamos parte de esta transformación, nos dimos a la tarea de construir las bases legislativas de un nuevo modelo orientado a transformar de manera profunda las instituciones, nacionales y locales. Pero sobre todo, a reintegrarle la dignidad al pueblo mexicano, que sufrió sistemáticamente todo tipo de vejaciones en el pasado.
Muchas gracias a los diputados locales, que saludé a su coordinador hace un rato, por su presencia; y a los presidentes municipales que asumirán el cargo pronto, frente a esta nueva realidad. Pero deben de estar tranquilos por su gobernador, seguramente tiene previsto cómo ayudarles frente a la quiebra de sus haciendas.
El camino de las reformas, de estas grandes reformas para el cambio de régimen, representan el principal legado de nuestro movimiento. No sé si alguno de ustedes sepa la experiencia de Brasil, porque no se hizo esta base jurídica en Brasil y aquí en México, hemos ya cimentado la ruta para la consolidación de nuestro estado social.
El camino de las reformas y las transformaciones…
Saludo a la esposa, que se ha incorporado, muchas gracias, a la esposa del gobernador Miguel Barbosa.
Me consta que ella prepara personalmente los alimentos. He estado dos veces con el gobernador y ella se esmera en no descuidar la atención principal, al gobernador y a sus invitados. Muchas gracias, señora.
Las grandes reformas, esta alternancia política que vivió el país, se construyó a partir de las históricas exigencias y demandas sociales, de una ciudadanía que anhelaba una ruptura radical con el pasado; ante el persistente ambiente de corrupción, impunidad, desigualdad y pobreza que había en nuestro país.
A diferencia de las viejas prácticas del quehacer legislativo, las grandes reformas se construyeron en una sinergia con los Poderes de la Unión, y con todas las entidades federativas a través del Constituyente Permanente, las cuales dieron su aval para aprobar las reformas constitucionales con rumbo al bienestar social.
Además, para su aprobación, en diversos casos incluso unánime, privilegiamos el consenso político, la tolerancia y el respeto.
Esto era propio de lo que estábamos iniciando, en una auténtica democracia. Y debatimos, deliberamos genuinamente con todos, con los colectivos, con grupos empresariales, con ciudadanía; a partir de mecanismos de apertura parlamentaria, como han sido los foros del Parlamento Abierto.
Se trata, entonces, no sólo de un logro personal o de grupo, incluso; sino es un logro derivado del consenso alcanzado con todas las fuerzas representadas; sobre todo en un logro de la ciudadanía y de quienes nos dieron la confianza para que fuéramos nosotros el vehículo para llevar a un buen puerto las demandas sociales.
Con ello, el sello de la Cuarta Transformación es y seguirá siendo, construir con la ciudadanía, escuchar sus demandas y caminar juntos, por el bien de México.
Esta obra de hechura colectiva, tiene como objetivo presentar de manera clara y estructurada las principales reformas concretadas por el Poder Legislativo durante la primera mitad del camino. Así como enfatizar en el abandono del modelo neoliberal, para arribar a uno de bienestar social.
Para ello, el propio libro, las dos obras, se tocan cuatro tópicos fundamentales: la crisis de abandono del modelo neoliberal, y la emergencia del paradigma social; las reformas constitucionales que fueron necesarios para el cambio de régimen, los instrumentos internacionales para el bienestar social y las nuevas leyes que aprobamos.
Detrás de todos los cambios y adiciones constitucionales y legales de estos tres años existe en realidad una concepción emergente de Estado, de constitución y de democracia que está a tono con los cambios mundiales y nacionales.
Presenciamos el desgaste y la crisis definitiva del Estado neoliberal ante la persistencia sistemática de la desigualdad, la pobreza extrema y el resquebrajamiento de algunos aspectos de la globalización que se han exacerbado frente a la pandemia de la COVID-19.
Nos encontramos frente a una perspectiva constitucional con contenidos sociales, renovados, que han ampliado el catálogo de derechos fundamentales con un enfoque especial en las clases desfavorecidas, las cuales se encuentran sus derechos reconocidos ampliamente en nuestra Carta Magna.
Estamos ante un nuevo entendimiento de democracia, originalmente entendido como el poder del pueblo, pues ya no sólo se le concibe como un encuentro electoral que descansa en la representación política sino como un ejercicio cívico permanente, sustentado en una democracia deliberativa y participativa, nutrida por un pueblo que retoma su sitio de primer orden en la configuración del Estado y en la cual las personas y no el mercado vuelve a ser el centro de la atención del Estado.
A lo largo de los últimos dos siglos, hemos vivido péndulos de modelos económicos en nuestra historia.
Pasamos de un Estad capitalista a uno de tipo social o de bienestar en algunas partes del mundo; después de uno social al Estado neoliberal. Y, ante la crisis de este último, se advierte hoy en día un nuevo movimiento pendular a nivel mundial hacia el Estado de bienestar social, en el cual los estados nacionales de manera activa se han convertido en los actores principales para enfrentar la crisis económica y sanitaria, siendo estos los encargados de generar las condiciones necesarias para erradicar la desigualdad y la pobreza.
Prueba de ello es que recientemente integrantes del G20 e integrantes de los 100 países más importantes del mundo, lograron un acuerdo histórico para crear un impuesto mínimo global de al menos el 15 por ciento a las empresas multinacionales que propugnan por una nueva progresividad fiscal y graba también a los gigantes tecnológicos, especialmente a las plataformas digitales para evitar paraísos fiscales, lo que nos llevará a una reforma profunda de los estados nacionales a nivel mundial en materia fiscal hacia el 2023.
El paradigma emergente del Estado de bienestar es el sustento ontológico y la hoja de ruta de las grandes transformaciones económicas, políticas, sociales y culturales que está experimentando la nación mexicana desde el actual régimen.
La herencia del régimen anterior ha sido desastrosa.
En América Latina, durante el 2019 la clase alta concentraba casi el 50 por ciento del ingreso total y la clase popular apenas el 17 por ciento.
Ahora en el 2020, el 10 por ciento de las personas con mayores ingresos concentran el 55 por ciento, siendo una de las regiones más desiguales a nivel mundial nuestro país.
Las desigualdades se atisba en México, si tomamos en cuenta que gracias al legado neoliberal las mujeres perciben un ingreso menor en un 60 por ciento con respecto a los hombres.
Apenas el 60 por ciento de la generación del milenio pertenece a la clase media, la cual se reduce cada día más y los hogares más pobres en México tienen un ingreso trimestral aproximado del 9 mil 103, es decir, tres mil pesos por mes; mientras que el de los más ricos oscila entre los 170 y los 200 mil pesos el mínimo.
La desigualdad encontró su máximo crecimiento con las llamadas reformas estructurales del viejo régimen, que ese es el origen y esa es la esencia de este proceso legislativo de los primeros tres años.
Tras poco más de 100 años de la entrada en vigor de nuestra Carta Magna, quienes integramos el Constituyente Permanente refrendamos los valores sociales planteados en el constituyente originario.
Recuerdo un discurso del gobernador en el aniversario de la Constitución, quien se preguntaba: “¿Hemos cumplido o no con la Constitución?”
Recuerdo aquel 9 de febrero del 2017 que se preguntaba: “¿Se han cumplido los anhelos y los sueños ahí plasmados?” y decía: Tenemos una sociedad con convicción democrático, cuyo desarrollo no necesita pólvora sino diálogo, acuerdos y consensos.
Esa afirmación sigue vigente.
Y por esa razón nosotros en el tomo uno, las reformas constitucionales para el cambio de régimen las agrupamos en derechos sociales, vitalidad democrática, seguridad jurídica, autonomía fiscal, nuevas denominaciones para las entidades y las reformas constitucionales fueron 18 materias.
La verdad es que si lo tomas en comparación con otras etapas, estos tres años fueron de mucha modificación constitucional; 56 artículos de la Constitución, 18 materias: extinción de dominio, prisión preventiva oficiosa, Guardia Nacional, Educación, Paridad de género, igualdad, personas y pueblos y comunidades afromexicanas, consulta popular y revocación de mandato, prohibición a la condonación de impuestos, bienestar social, movilidad y seguridad vial, juventud, fuero presidencial, transformación del Poder Judicial, prohibición de partidas secretas en el presupuesto, nacional, nombres y seguridad privada. Es decir, 18 materias y 56 artículos de la Constitución.
El tomo uno describe una a una estas reformas que en tres años realizamos en el Congreso Mexicano y en el Constituyente Permanente.
También tenemos las leyes que creamos de nueva forma, que dan vitalidad democrática, seguridad y justicia, autonomía fiscal y además instrumentos internacionales para el bienestar social, derechos laborales, igualdad y no discriminación, economía y comercio internacional, convenios con la OIT que no se habían ratificado en materia laboral, como la de trabajadores domésticos y como los acuerdos con Ginebra en materia de derechos humanos. Son 25 instrumentos internacionales que ahora estamos dando paso para el bienestar social en nuestro país.
Quiero agregar también que estos dos tomos son producto de un esfuerzo. Desde el primer día empecé a tomar nota y fichas informativas, y por eso lo trasladé a estos dos tomos que ahora me parece, les recomiendo puedan leer.
Uno de los últimos temas que aprobamos fue lo de juicio político, una ley nueva y la Ley de Revocación de Mandato.
Esta herramienta de los ciudadanos nos permite contar con un control permanente de los votantes sobre los funcionarios electos, haciendo real y efectiva la ejecución del derecho a reemplazarlos.
El licenciado Andrés Manuel López Obrador, ya como Presidente de la República, envió una iniciativa al Congreso de la Unión en el año 2019 para incluir esta figura de participación ciudadana en nuestra Constitución.
En ese mismo año, después de un análisis exhaustivo y un debate fuerte en el Congreso Mexicano, aprobamos la reforma constitucional y con ello se crea la figura de revocación de mandato del Presidente de la República, que también aplica para gobernadores de acuerdo con sus normas locales y las particularidades de cada entidad.
Con esta reforma a nivel federal ya en vigor en nuestro país, se cumple un compromiso de campaña del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
También en el Congreso Federal aprobamos recientemente, ahora iniciando el periodo en septiembre, la Ley Reglamentaria, la Ley Federal de Revocación de Mandato para tener el marco jurídico completo que nos permita realizar este importante ejercicio de democracia participativa que se consolida con la movilización activa y pujante de toda la ciudadanía.
Es importante dejar en claro que esta es una medida que el propio Presidente impulsó y que en su posición democrática se somete al principio que en todas las plazas pronunció: “En la democracia, el pueblo pone y el pueblo quita”. Y por eso, dijo él, me someteré, a la primera mitad del camino, a una revocación de mandato para que la población decida.
Es por eso que, desde Puebla, desde Puebla queremos lanzar el llamado para que la gente participe en este ejercicio ejemplar de democracia directa, porque tenemos que actuar y no dejar solo a nuestro Presidente de la República, porque debemos optar porque siga en el camino de la construcción democrática de nuestro país.
¡Claro que queremos que siga! ¡Que siga el Presidente de la República al frente de esta responsabilidad constitucional!
Por eso, desde aquí, desde Puebla, con la presencia de uno de los mejores gobernadores del país, lanzamos el llamado a los ciudadanos para que ejerzamos nuestro derecho en marzo próximo, en este ejercicio inédito, ejemplar, de democracia directa, por vez primera instalada en nuestro país.
Y, por eso, ayer; ayer debatimos, señor Gobernador, sobre los alcances de los artículos de la revocación de mandato, para que no haya límites en la recopilación de firmas y en el uso de documentos para que la población pueda ejercer este elemental derecho.
La revocación, sólo procederá si nosotros actuamos como entes activos.
Por eso, al acudir a esta fiesta democrática que ratificará nuestra confianza en marzo, acudiremos, debemos acudir, para refrendar este compromiso para que el Presidente siga cambiando al país y se alcance una transformación en beneficio de los que menos tienen, de los olvidados, de los menospreciados.
Es muy importante decirles que ya se ha iniciado el proceso porque la ley señala en octubre, para la expedición de formatos. Y, el mes que entra, noviembre, inicia, el 1° de noviembre, la recopilación y la entrega de nombres y firmas para que, en diciembre, se lance la convocatoria y, en marzo, se celebre, por vez primera, este ejercicio de participación directa, que, de manera unánime, de manera unánime aprobamos en el Congreso Mexicano.
Por eso, señores y señoras, me gustaría pedirles que lean esta obra. Esta obra, de dos tomos, contiene lo hecho en tres años. Muchos de ustedes también participaron como legisladores en los congresos locales. Seguramente le dieron seguimiento al mismo.
Por eso, muchas gracias, Gobernador, por su asistencia; muchas gracias a los presidentes municipales, a los diputados federales que me acompañan, a los diputados locales, a los líderes naturales y a los empresarios que ahora nos acompañan.
Y quiero destacar, señor Gobernador, la presencia de nuestros amigos senadores.
Está, obviamente, la senadora Malú Micher, de Guanajuato. Mujer incansable en materia de paridad y de igualdad. Es una mujer incansable, que el pasado sábado rindió un novedoso Informe, en la plaza de Guanajuato.
Es tan formidable Malú, incluso anímicamente y espiritualmente, que un día antes falleció su suegro y no quiso suspender su responsabilidad. Al contrario, se lo dedicó a su suegro, su Informe. Eso habla de la entereza y el cariño que le tiene a su actividad.
Está la senadora Verónica Camino, de Yucatán, también. La senadora Griselda Valencia, de Colima. Allá está Griselda. La senadora Imelda Castro, de Sinaloa. La senadora María Merced, de Hidalgo. La senadora Nancy de la Sierra, de aquí; buena amiga.
La senadora Sasil de León, también, del PES, la Coordinadora. El senador Eli Cervantes, también está, de San Luis Potosí. La senadora Blanca Piña, de Michoacán. La senadora Nadia Navarro, de aquí de Puebla, buena amiga. Israel Zamora, de la Ciudad de México, senador del Verde. Graciela Gaitán, también nuestra amiga senadora, de allá, de San Luis.
Cecilia Sánchez, de Campeche. La vigorosa -todas son vigorosas-, pero Lucía Trasviña tiene un vigor especial; ella es de Baja California Sur. Ana Lilia Rivera, que es una buena abogada, jurista y destacada parlamentaria de aquí de Oaxaca. Sergio Pérez, también senador por Morelos, que se incorporó.
Y obviamente quiero destacar a una gente que nos ha ayudado mucho. Gobernador: Tiene un buen senador en Morena, junto con Nancy, pero un senador que siempre debate, defiende y está muy pendiente de Puebla, el senador Armenta, que nos ha ayudado mucho y que siempre defiende, siempre, siempre, defiende al Estado y a su Gobernador.
También, quisiera decirles que hay diputados federales que nos acompañaron. También muchas gracias a las diputadas federales y los diputados federales que nos honran con su presencia.
Es un momento clave para la vida del país, es la mitad del camino de un Presidente distinto; yo diría que va a ser el mejor Presidente que haya tenido México en su historia moderna.
Va a ser el Presidente que deje una huella imborrable por su estilo, por su amor a la gente que menos tiene, por su autenticidad y por su vocación de servicio a la comunidad. Por eso, tenemos que empeñarnos todos en mantener la unidad.
Hace un rato la prensa, antes de que llegara el ciudadano Gobernador, me preguntó si en Puebla no habría problemas en el futuro. Les dije: “Ninguno. Hay Gobernador y hay un gran pueblo”; y va a estar unido este pueblo, este estado de Puebla. Estoy seguro de eso, estoy convencido de que todo saldrá adelante.
Ese es mi mensaje y quiero agradecerle a Álvaro, porque me hizo recordar algunas etapas de mi vida en este devenir histórico, que las ha relatado con puntualidad y con una claridad meridiana.
Y quisiera rogarles, yo sé que los presidentes están recibiendo su primera quincena, pero el libro está regularmente barato, para que lo puedan adquirir, porque también los legisladores nos redujimos el salario, y de casi 500 mil pesos que ganaban los anteriores senadores, o más…; aquí dice el gobernador que más. Ahora ganamos 105. Entonces, tenemos que dar clases, o dedicarnos a escribir para poder completar.
Pero me alegra mucho estar aquí. Muchas gracias a los senadores de Puebla, por estar todos:Nadia; se disculpó uno de ellos; pero Nadia, Nancy, la queremos mucho, y también, sí, Nadia está, y también el senador Armenta.
Entonces, muchas gracias a todos por estar; muchas gracias por estar. A todos mis respetos, mi aprecio, por estar con nosotros en la primera presentación de esta obra, la más reciente de mi autoría.
Buenos días.