SENADORA OLGA SÁNCHEZ CORDERO: Muy buenos días a todas, a todos ustedes.
A nombre de mis compañeras senadoras y compañeros senadores, quiero extender la más cordial bienvenida a la Delegación del Senado de la República Checa, que hoy nos distingue con su valiosa visita y que se encuentra integrada por los senadores Tomáš Goláň. Muchas gracias, Tomáš; Jan Holásek, muchas gracias. Pavel Karnik y Martin Serviseck, muchas gracias.
Además del excelentísimo señor Zdeněk Kubánek, embajador extraordinario y plenipotenciario de ese país, en México.
De igual modo, les doy la bienvenida a los funcionarios de esta representación diplomática, que forman parte de la delegación. Muchas gracias.
Mis compañeros senadores aquí presentes, quisiera yo que también se presentaran, por favor, si son tan amables.
SENADORA GABRIELA BENAVIDES COBOS: Gracias, señora Presidenta.
Senadora Gabriela Benavides Cobos, presidenta de la Comisión de Relaciones Internacionales con Europa, del Partido Verde Ecologista de México. Gracias.
SENADOR EMILIO ÁLVAREZ ICAZA: Buenos días. Bienvenidos y bienvenidas, es un gusto tenerles acá en el Senado mexicano.
Ni nombre es Emilio Álvarez Icaza, soy senador por la Ciudad de México, soy vicecoordinador del Grupo Plural y secretario de la Comisión de Derechos Humanos.
Grande alegría tenerlos acá.
SENADOR NAVOR ALBERTO ROJAS MANCERA: Bienvenidas, bienvenidos.
Navor Alberto Rojas Mancera, del estado de Hidalgo, del Partido Morena, secretario de la Comisión de Marina. Bienvenidos.
SENADOR RAFAEL ESPINO DE LA PEÑA: Buenos días, también bienvenidos.
Rafael Espino, miembro del Grupo Parlamentario de Morena y presidente de la Comisión de Justicia del Senado de la República.
SENADOR EDUARDO RAMÍREZ AGUILAR: Buenos días, soy Eduardo Ramírez, senador por el estado de Chiapas, presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales.
Sea bienvenida la delegación de la República Checa. Muchas gracias, presidenta, por la invitación.
SENADORA OLGA SÁNCHEZ CORDERO: Y el senador Mancera.
SENADOR MIGUEL ÁNGEL MANCERA: Gracias, Presidenta.
Muy buenos días, a todas y todos ustedes. Por supuesto darle la más cordial bienvenida al Senado de la República de nuestro país y esperamos que los trabajos sean de beneficio para ambas naciones y obviamente, esperamos aprender mucho de lo que nos van a platicar y conversar con ustedes.
Muchísimas gracias.
SENADORA OLGA SÁNCHEZ CORDERO: Muchas gracias.
Seguramente su país pasa algo similar, desde el punto de vista constitucional, la Constitución asigna al Senado de la República, la facultad exclusiva de analizar la política exterior y la ratificación de tratados internacionales.
En México, el funcionamiento del Estado se basa en una separación de poderes, cuya historia se remonta al siglo XIX, en 1824, en la Primera Constitución Mexicana. En este ordenamiento, se estableció un sistema bicameral, otorgando funciones de representación popular a la Cámara de Diputados; mientras que el Senado de la República fungía y funge como depositario del Pacto Federal.
Posteriormente, en 1857, también se promulgó una nueva Carta Magna que suprimió la Cámara Alta, la Cámara de Senadores, y no sería restablecida legalmente, sino hasta noviembre de 1874 e integrada en 1875.
Posteriormente, la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos promulgada tras la Revolución, y vigente desde 1917, confirmó un Poder Legislativo conformado de manera bicameral.
Éste, con un Senado integrado por dos miembros de cada estado y otros dos por el entonces llamado Distrito Federal, hoy Ciudad de México. Que, como vieron, el señor senador Emilio Álvarez Icaza es senador de la Ciudad de México, y mis compañeros se presentaron como representantes de los diversos estados de la República.
En 1917, este Senado estaría integrado por, les decía yo, dos miembros de cada estado y otros dos por la Ciudad de México.
Sede de los Poderes de la Unión, electos en ese tiempo de manera directa para un periodo de cuatro años, renovándose por mitad cada dos años.
En 1933, se amplió el periodo del mandato de los senadores, quedando en seis años, y se suprimió la reelección inmediata para el cargo de senador.
El desarrollo político y la evolución demográfica del país, demandaron que en 1993 se renovara la composición de esta Cámara, quedando integrada por cuatro senadores por cada estado, más cuatro de la capital mexicana; de los cuales tres serían electos por el principio de votación mayoritaria y uno más sería asignado a la primera minoría.
Finalmente, en 1996 se reformó la Constitución, estableciendo el sistema vigente en el que la Cámara de Senadores cuenta con 128 integrantes, de los cuales dos son electos según el principio de mayoría relativa, y uno es asignado a la primera minoría; y los 32 restantes, son electos de acuerdo al principio de representación proporcional de una lista nacional cerrada.
En cuanto a la participación de las mujeres, que es muy importante esto, hace casi 60 años se eligieron a las dos primeras senadoras; una de ellas, la senadora María Lavalle Urbina, que encabezó, por cierto, la presidencia de este cuerpo legislativo en 1965.
Hoy, en las dos Cámaras del Congreso, logramos por primera vez en la historia la paridad, igual número de mujeres, igual número de hombres.
Esto ha sido un gran salto cuantitativo y yo diría también, porque no solamente cuantitativo sino también de calidad.
¿Por qué? Porque un congreso paritario siempre tendrá otra visión; por una parte el 50 por ciento y por otra parte el 50 por ciento.
Nosotros elevamos a rango constitucional el principio paritario, y este principio paritario es transversal a toda la Constitución y a las leyes secundarias. Esta es realmente una gran victoria de que hemos logrado por esta auténtica paridad de género.
Los actores políticos facultados para iniciar los procesos legislativos, son el Presidente de la República, las legislaturas de los estados, las y los diputados, y las y los senadores.
Y las y los ciudadanos en un número equivalente por lo menos al 13 por ciento de la lista nominal de electores. Todos éstos tienen la facultad de iniciativa.
Estos últimos, los ciudadanos y las ciudadanas, presentan sus propuestas ante cualquiera de las cámaras del Congres de la Unión para su estudio, discusión y, en su caso, aprobación.
Estos son, digamos, los sujetos que tienen la legitimación para presentar las iniciativas de ley.
Posteriormente viene el trabajo de las Comisiones, donde se analizan estos proyectos; se emite, según sea el caso, opiniones, resoluciones o dictámenes para ser discutidos en el Pleno, máximo cuerpo deliberativo de esta Soberanía.
Durante su proceso de discusión, los dictámenes son sometidos a dos lecturas: El primero, para dar a conocer el contenido. Y, el segundo, para debatirlo y votarlo. Dos veces.
Por su parte, los proyectos de ley o decretos, se votan en lo general y en lo particular, y dependiendo de su relevancia, este acto puede realizarse en una sola votación o por separado.
En el caso de que la votación sea negativa, el proyecto es regresado a la Comisión o desechado, mientras que, si es aprobado, es remitido a nuestra colegisladora, a la Cámara de Diputados, para su discusión, y, en su caso, su aprobación. Esto, siempre y cuando no sea el caso de una de las facultades exclusivas de alguna de las cámaras.
Por último, en caso de ser aprobado, se envía al Ejecutivo Federal, el cual podrá actuar en dos sentidos: Realizar observaciones, en cuyo caso se remite nuevamente a la Cámara de origen para solventarlas, o promulgarlo y ordenar su publicación en el Diario Oficial de la Federación.
Esas son, digamos, las actuaciones del Ejecutivo Federal.
Adicionalmente, este Senado se apoya en órganos técnicos, como el Centro de Estudios Internacionales Gilberto Bosques -que aquí está Aliza, la Directora General, y lleva todas las relaciones internacionales-, y el Instituto Belisario Domínguez, que es un Instituto académico, de investigación, muy importante.
Sin más por añadir por el momento, les invito a que avancemos en nuestro programa para que tengamos la oportunidad de intercambiar más detalles acerca de las iniciativas y agendas que se encuentran trabajando en nuestros respectivos parlamentos.
Nuevamente sean ustedes muy bienvenidos.
SENADOR TOMÁŠ GOLÁŇ (Interpretación del Checo al español): Distinguida Presidenta y apreciadas senadoras, senadores. Queridos colegas.
Para nuestra comisión del Senado del Parlamento de la República, es un gran honor estar presente en esta reunión, en este ambiente tan agradable.
Sabemos que México juega un rol muy importante en el panorama internacional. Sabemos que es un país muy grande, con 126 millones de habitantes, es decir, ustedes juegan un rol importante en la economía mundial, ya que son la décima quinta economía más potente del mundo y forman parte del Grupo G20, un grupo muy reconocido a nivel económico.
Estudiando las predicciones del Banco Mundial, se supone que en el año 2030 México debería convertirse en la novena economía más potente del mundo, incluso en el año 2050, ustedes deben ser la séptima economía mundial.
Entonces, me place comentar que nuestras mutuas relaciones gozan de magníficas condiciones y son muy cordiales. Cómo no hay que comentar que este año celebramos el primer centenario del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre la República Checa y México.
Por supuesto, somos conscientes de que una de las avenidas que tienen ustedes aquí en la capital, lleva el nombre de nuestro primer Presidente, Tomáš Garrigue Masaryk, y sabemos que incluso hay una escuela Secundaria que lleva el nombre Masaryk, incluso si lo saben, la actual Embajadora de México ante la República Checa, había estudiado en dicha escuela.
Somos conscientes de que México representa nuestro socio principal en el Continente latinoamericano, es decir, la República Checa representa el 54 por ciento del comercio mutuo que tenemos con los diferentes países de América Latina. Luego sigue Brasil, que ocupa el 18 por ciento del comercio mutuo, así que entonces podemos ver la importancia de las relaciones comerciales que tenemos entre nuestros países.
Así que una vez más, reitero mi agradecimiento por poder visitar México y por poder debatir con ustedes varios temas. Espero con impaciencia los temas que podamos abrir, estaré dispuesto a contestar todas sus preguntas.
Si me permiten, antes de contestar sus preguntas, me gustaría en forma, presentarles cómo funciona nuestro Parlamento.
Presidenta, es muy interesante escuchar cómo funciona el proceso legislativo de su país. Espero que a usted le resulte igualmente interesante el mismo proceso de nuestro país.
Nuestro proceso legislativo es diferente. En primer lugar, me gustaría explicar un poco cómo funciona nuestro Senado y su funcionamiento.
El año pasado, ustedes celebraron el aniversario 200 de su independencia, nuestro país como República es más reciente, puesto que esta forma se estableció tras terminarse la Primera Guerra Mundial, en 1918.
Presidenta, seguro les agradará escuchar que fuimos uno de los primeros países europeos que estableció la elección para las mujeres, en el año 1920. No obstante, el primer Senado se estableció en el año 1922 y los primeros integrantes del Senado no obstante no se elegían de forma directa, sino que los elegían los diputados.
Eso se daba por los tiempos que vivíamos, poco después de la Primera Guerra Mundial, puesto que nuestra sociedad aún no estaba preparada para otro tipo de elección.
No obstante, aquel Senado entonces funcionaba tan sólo al año 1938, cuando en Europa y en Alemania, sobre todo, empieza la región nazi y nuestro país tuvo que someterse al llamado Pacto de Múnich; lo ciudadanos de nuestro país saben muy bien que la ejecutiva de entonces rechazó dicho pacto que proponía Hitler.
A continuación, estalla la Segunda Guerra Mundial y tras la Segunda Guerra Mundial, en el año 1948, cambia el sistema político de nuestro país; empieza el sistema comunista.
No obstante, los comunistas no apoyaban el sistema parlamentario, así es que se puede decir que el sistema bicameral no existía hasta el año 1989.
En 1990, tuvimos las primeras elecciones libres y en aquel entonces aún la Constitución no contaba con el Senado. Tan sólo la primera Constitución de la República Checa, tras la separación de la antigua Checoslovaquia, su división de la República Checa y la República Eslovaca, se establece el funcionamiento del Senado. Hablamos del 1º de enero del año 93.
La primera Constitución del 93, estipula el funcionamiento del Senado, tan sólo se establece en el año 1996, cuando tuvimos las primeras elecciones en el Senado.
En aquel entonces, se dio una situación bastante curiosa. Nuestros senadores se eligen por el periodo de seis años y cada dos años se renueva un tercio del Senado.
A continuación le explicaré el número de senadores como entonces funcionamos.
Quiero aclarar esta situación puesto que en aquellas primeras elecciones se eligieron los 81 senadores, que son todos los integrantes del Senado, y había que estipular cómo se turnarían cada dos años, así que realmente se dio un sorteo.
Algunos entonces eligieron ejercer su periodo ejecutivo durante dos años, otros cuatro años y luego seis años. De esta forma se hizo el primer cambio en el Senado, tras los dos años de elecciones.
Ahora, por supuesto, no nos podemos imaginar semejante situación.
Acabo de comentar que contamos con 81 senadores, puesto que contamos con 81 distritos para las elecciones al Senado.
No obstante, dichos distritos no corresponden a las comarcas, simplemente se utilizan en los comicios al Senado.
Creemos que en cada distrito contamos con más o menos el mismo número de votantes; es decir, cada distrito cuenta con unos 130 mil votantes. No olviden que nuestro país es mucho más pequeño que el de ustedes.
Así que de esta forma, el mandato de (inaudible) cuenta más o menos con el mismo peso.
Utilizamos el sistema mayoritario absoluto y hay 12 rondas; es decir, tras la primera siguen los dos senadores y el que gane mayor al 50 por ciento, luego es nombrado senador durante seis años.
Nosotros denominamos el Senado como un seguro de la democracia, puesto que sin el Senado no se puede modificar la Constitución.
El Senado nombra a los jueces del Tribunal Constitucional y también aprobamos a los diferentes directivos que forman parte de la Administración Pública, por ejemplo, el Presidente de la Contraloría del Estado, etcétera.
No obstante, el Senado no aprueba el presupuesto estatal; eso lo hace tan sólo la Cámara de Diputados.
Ya que usted comenta de forma detallada las iniciativas legales y que más presenta, entonces en nuestro país puede ser el Presidente de la República, el Gobierno, la Cámara de Diputados, el Senado y los diferentes gobiernos regionales.
No obstante, el proceso legislativo funciona de forma un poco diferente. Las leyes se van reparando en el Gobierno, que cuenta con el Consejo Legislativo, donde se reciben todas las enmiendas, todos los comentarios de todas las entidades diferentes; las diferentes asociaciones, etcétera.
Así que en el marco de las iniciativas gubernamentales existe el esfuerzo de contar con todos los integrantes, con todos a los que les atañe dicha ley.
Así que pueden imaginarse que entonces la mayor parte de las leyes se establece a través del Poder Ejecutivo. Una vez preparada dicha ley por parte del Gobierno, se traspasa a la Cámara de Diputados.
En la Cámara de Diputados se realiza la primera lectura; por supuesto se abre un debate, y luego, a continuación, las leyes se envían a las comisiones correspondientes. Por supuesto, depende de qué trata dicha ley. Así que, según eso, se distribuyen a las comisiones.
Aún sigo hablando de la Cámara de Diputados.
Una vez que se aprueba la postura de las diferentes comisiones, entonces se realiza la llamada segunda lectura y en el marco de la segunda lectura se realiza el debate más importante, muy emotivo a veces, y en el marco de dicha lectura, también se pueden presentar las diferentes enmiendas.
Por ejemplo, si la oposición no está de acuerdo, o incluso los diputados del gobierno, o de repente se descubren algunos errores. Así que para ello sirve la llamada segunda lectura.
Tras la votación sobre las enmiendas, entonces se realiza la tercera lectura, donde se somete a la votación en su totalidad.
Una vez aprobada la ley, mediante la tercera lectura en la Cámara de Diputados, se envía al Senado, y el Senado tiene el deber, en el marco de 30 días, dedicarse al estudio de dicha ley.
Por supuesto, el Senado puede tomar la decisión de no estudiar la ley concreta. Y en este caso la ley entra en vigor en la forma; en, digamos, como nos lo envían de la Cámara de Diputados. No obstante, eso no ocurre con mucha frecuencia.
Habitualmente estudiamos todas las leyes recibidas por parte de la Cámara de Diputados y tenemos la Comisión que organiza esta labor y las diferentes comisiones estudian todas las partes de ley y a continuación en el Pleno del Senado tenemos una sola lectura.
Por supuesto, el Senado tiene varias opciones. Existe la opción de no estudiar la ley en concreto, o, por supuesto, aprobarla literalmente como la recibimos de la Cámara de Diputados, o podemos rechazar una ley también.
Si no se da ninguna de las opciones mencionadas, entonces a continuación se realiza lo que denominamos el debate detallado y en el marco de dicho detalle del debate, los diferentes senadores pueden presentar sus enmiendas.
Una vez aprobadas dichas enmiendas, la ley se somete a la votación, incluidas las nuevas enmiendas presentadas y una vez terminado este proceso devolvemos la ley a la Cámara de Diputados.
Es importante comentar que la Cámara de Diputados no cuenta con una fecha máxima hasta cuándo tienen que dedicarse al estudio de las leyes devueltas por parte del Senado, al estudiar su Senado, su Congreso, sus facultades y yo creo que su Senado cuenta con más mandato. No obstante, como dije, se trata de leyes muy útiles, usualmente la Cámara de Diputados retoma la ley devuelta, en un plazo razonable.
A continuación se realiza la votación. Si se trata de una propuesta de ley devuelta, entonces la Cámara de Diputados tiene que superar el rechazo del Senado con la mayoría absoluta, en donde contamos con 200 diputados en la Cámara de Diputados. Si no se logra la mayoría absoluta, la ley no puede entrar en vigor y de esta forma termina todo el proceso legislativo.
Si se trata de una ley devuelta por parte del Senado, con las enmiendas, entonces la Cámara de Diputados acude a dos opciones: primero se votan las enmiendas, solamente las enmiendas; aprobarse las enmiendas pasadas por parte del Senado, ya no se necesita la mayoría absoluta, pero si no se aprueban dichas enmiendas, la Cámara de Diputados tiene el deber de aprobar la versión original que había enviado al Senado, y ahí sí se necesita otra vez la aprobación por parte de la mayoría absoluta. De esta forma funciona el proceso legislativo de forma habitual.
Como he comentado, también nuestro Senado puede crear leyes y cuenta con la iniciativa legislativa. Si por ejemplo, presentamos una propuesta de ley y 18 senadores aprueban dicha iniciativa, entonces se traspasa a las comisiones, se realiza la primera y la segunda lectura, y a continuación se envía a la Cámara de Diputados.
Lamentablemente, repito, la Cámara de Diputados no cuenta con un plazo límite, hasta cuando tiene que estudiar las iniciativas devueltas por parte del Senado.
Una vez aprobada la iniciativa por parte de la Cámara de Diputados, de nuevo la recibimos nosotros y la aprobamos en la tercera lectura. A lo largo de mi mandato, vivimos varias ocasiones el hecho de que se devuelven algunas leyes y precisamente la no existencia de un plazo máximo, eso nos complica muchas veces nuestra labor y a veces sentimos cierto desequilibrio dada esa no existencia del plazo límite.
Distinguida Presidenta, usted comenta el equilibrio de género que tienen ustedes en ambas Cámaras. La verdad admiro estas iniciativas, para nosotros es algo novedoso; en nuestro Senado contamos tan sólo con 13 senadoras y justo por las razones que usted menciona, es importante contar con la visión femenina; puesto que nos puede enriquecer y puede enfocar los problemas de otra forma.
A veces los hombres no somos capaces de entender ciertos problemas.
Sé que usted se dedica a esta labor durante muchos años, admiro su trabajo y sus palabras corroboran que sí tiene sentido tratar de apoyar estas iniciativas, para que contemos con más mujeres en nuestra labor.
Si me permite, en esta forma me gustaría concluir la presentación del proceso legislativo de nuestro país; aunque por supuesto, podríamos hablar largo y tendido de dicho proceso, pero no tenemos todo el día. Pueden darse cuenta de que nuestro sistema es algo diferente.
Una vez más reitero mis agradecimientos por tener la oportunidad de reunirme con ustedes y por supuesto, estoy abierto a contestar cualquier pregunta que les surja.
Esperamos con impaciencia nuestro debate.
SENADORA OLGA SÁNCHEZ CORDERO: Muchas gracias, senador Tomáš Goláň, por sus palabras.
Le pediría yo a Alisa, si no tienes inconveniente, moderar esta mesa. Por favor, Alisa.
ALIZA CHELMINSKY: Muchas gracias, Presidenta.
Antes de iniciar el diálogo parlamentario, agradeceremos su intervención al doctor Arturo Garita, Secretario General de Servicios Parlamentarios del Senado de México.
DOCTOR ARTURO GARITA ALONSO: Muchas gracias.
Trataré de ser muy breve y con el permiso de la Presidenta del Senado. Agradezco la oportunidad que me brindan de participar en esta reunión, destacando que los puntos de vista que verteré son a título personal, ya que la mesa es plural y cada grupo parlamentario tendría una visión distinta de lo que yo pudiese comentar; por lo tanto, los planteamientos serán a título personal y como órgano técnico del Senado.
La Presidenta ya habló de lo que ha sido la estructura del Congreso Mexicano, solamente yo sería muy breve al destacar cuatro cualidades del Congreso Mexicano, que es donde reside la esencia de las diferencias con su Congreso.
La primera gran diferencia es que tenemos un Congreso bicamaral simétrico, tiene facultades simétricas. Lo que aprueba una Cámara, lo debe aprobar necesariamente la otra; por lo tanto, la función legislativa de ambas Cámaras es en una labor de espejo.
No puede aprobar una sola palabra una Cámara que no ratifique la otra Cámara. Por lo tanto, nuestro Congreso es bicamaral simétrico.
Nuestro proceso legislativo es sucesivo, en etapas sucesivas y subsecuentes. Si una Cámara no está de acuerdo con lo que aprueba la otra, lo deberá regresar a la Cámara de origen para que ratifique, modifique o insista en su versión; por lo tanto, esta labor de espejo es necesaria en ambas Cámaras.
También la figura de las tres lecturas, de hecho existía en el reglamento del Congreso en 1824, nada más que era el momento en que se presentaba la iniciativa y se debatía, y se consultaba a la Cámara si se tomaba en consideración.
Y en ese momento, una vez que la Cámara aceptaba tomarlo en consideración, se turnaba a comisiones. Si la Cámara decía que no se aceptaba de tomar en consideración la iniciativa se desechaba.
Por lo tanto, este primer debate que ustedes agregan como primera lectura, existía en ese reglamento de 1824.
Actualmente nuestro Reglamento solamente prevé dos lecturas sucesivas en ambas Cámaras; por lo tanto, esta figura viene a darle economía procesal al procedimiento legislativo, pero esta figura existía en México desde 1824.
Yo destacaría eso nada más.
Nuestro proceso legislativo ha cambiado procedimentalmente de manera muy mínima desde 1824; sin embargo, se han incorporado nuevas figuras que los propios legisladores hablarán de ella como la iniciativa ciudadana, la iniciativa preferente, la figura de la revocación de mandato como figuras que vienen a oxigenar la participación de nuestra Suprema Corte de Justicia o el Tribunal Constitucional, en el caso de ustedes, viene a refrescar y a tratar de hacer mejores las leyes.
Sería mi participación, Presidenta, solamente para destacar estas figuras mínimas.
Gracias por su presencia y bienvenidos a México.
ALIZA CHELMINSKY: Muchas gracias, doctor Garita.
Vamos a iniciar ahora el diálogo parlamentario alternando entre integrantes de la Delegación de la República Checa e integrantes de la Delegación del Senado de México.
Pido al senador Miguel Ángel Mancera iniciar esta conversación, por favor.
El senador Miguel Ángel Mancera es el Coordinador del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática.
Adelante, senador.
SENADOR MIGUEL ÁNGEL MANCERA ESPINOSA: Muchas gracias.
Primero quisiera agradecer a la Presidenta del Senado de la República por esta invitación.
Saludar a mis compañeras y compañeros del Senado y agradecer por la presencia a todos y cada uno de los distinguidos integrantes de esta Delegación.
Al señor Embajador, por supuesto a quien encabeza a la Delegación; a los representantes integrantes del Comité de Asuntos Jurídicos y Constitucionales del Senado de la República Checa. Mucha gracias.
Sin duda, es muy interesante analizar los diferentes procesos parlamentarios.
Yo advierto, en principio, que estamos hablando de diferentes formas de regímenes políticos.
Nosotros tenemos un régimen presidencial en la Ciudad de México; perdón, en México. Perdón. Me refiero a la Ciudad de México, porque fui jefe de Gobierno de la Ciudad de México, y a veces se queda uno con esa inercia.
Pero en México tenemos el régimen presidencialista, y advierto que en la República Checa ustedes tienen un régimen parlamentario, democrático, pluralista. Entonces, eso hace una gran diferencia en todos y cada uno de los pasos, y en todos y cada uno de los temas.
Quiero decirles que nosotros en nuestro país, ya tenemos también la figura que permitiría tener este régimen parlamentario, y obviamente poder tener esta figura que ustedes tienen, como este Primer Ministro; este Vicepresidente, digamos, de alguna manera; este enlace entre quien funge como Presidente en las cámaras y la función de las cámaras, que se vuelve muy interesante.
Entonces, yo quisiera conocer de parte de ustedes esta experiencia, porque acá en México se ha hablado mucho de la posibilidad de tener un gobierno de coalición y en ese esquema del gobierno de coalición resulta fundamental esta figura, esta figura de un régimen parlamentario, de un régimen en donde sigue operando, o semiparlamentario, donde sigue operando la figura del Presidente como Jefe de Estado, pero se tiene una función de gobierno y de enlace de gobierno, que para todos los demás efectos legislativos es diferente.
Porque ahora, por ejemplo, nosotros tenemos aquí una mayoría muy consolidada, que es afín al gobierno de la Presidencia de la República.
Por lo tanto, nuestras leyes secundarias, pues cuando se someten a debate, prácticamente sabemos que van a pasar, por más que hiciéramos nosotros intentos.
Si esto viene desde la Presidencia de la República, es un hecho que se va a consolidar, salvo las reformas constitucionales, porque esas sí requieren de una mayoría calificada y ahí tiene que estar todo el consenso del Senado de la República.
Entonces, me gustaría saber: En esta experiencia del régimen que tienen ustedes, ¿cómo funciona? ¿Cómo es que se puede dar esto?
Si es mucho más en la labor de cabildeo, la labor de convencimiento de las fuerzas políticas que pudieran converger, dado que nosotros todavía conservamos esta figura de régimen presidencial.
Sería mi primera intervención, o quizá la única.
Muchas gracias, Presidenta.
Gracias.
SENADORA OLGA SÁNCHEZ CORDERO: Muchas gracias, senador Mancera.
ALIZA CHELMINSKY: Agradeceremos ahora la intervención del Vicepresidente del Comité de Asuntos Jurídicos y Constitucionales del Senado del Parlamento de la República Checa, el senador Jan Holásek.
SENADOR JAN HOLÁSEK (Interpretación del Checo al español):