SENADOR RICARDO MONREAL: Si les parece bien, secretario, bienvenido. Queremos darle la bienvenida.
Les pido que le demos una cordial bienvenida al secretario de Educación Pública. No sólo es un funcionario eficaz, talentoso, sino que en lo personal me ha sorprendido mucho, gratamente, que lo que era anteriormente un conflicto permanente, ahora sea una institución respetable, con capacidad de diálogo y negociación.
Creo que Esteban Moctezuma es uno de los mejores funcionarios que tiene el Presidente de la República. Nos alegra que esté aquí, a conversar sobre un tema fundamental: la educación en México.
Están, secretario, senadores de Morena, del PT y del PES. Y, va a conducir esta reunión, como moderador, el presidente de la Comisión de Educación, el senador Rubén Rocha.
Si les parece, el formato sería el siguiente. Primero, esperaremos que exponga la parte introductoria el secretario. Luego lo invitamos a comer aquí en el salón de adjunto, y ahí hacemos las preguntas y las respuestas.
Que modere nuestro amigo Rubén Rocha. Adelante.
SENADOR RUBÉN ROCHA MOYA: Gracias, Coordinador.
Compañeras, buenas tardes, compañeras senadoras, compañeros senadores. Al igual que Ana Lilia, me da mucho gusto verlas.
Bienvenido, maestro Esteban Moctezuma, secretario de Educación. Sin más, ya ha explicado el Coordinador la mecánica, le cedo la palabra.
SECRETARIO ESTEBAN MOCTEZUMA BARRAGÁN: Muchísimas gracias. Prometo tratar de no tardarme mucho, para que podamos pasar a comer.
Muy buenas tardes a todas y a todos. Agradezco a todas y a todos, en especial al senador Ricardo Monreal Ávila y al senador Rubén Rocha, la invitación para participar en esta Plenaria del Grupo Parlamentario de Morena en el Senado de la República, a la que como nos comenta Ricardo, asisten también senadoras y senadores del Partido del Trabajo y del Partido Encuentro Social.
Antes que nada, quiero expresarles mi agradecimiento profundo por todo el apoyo que recibimos de todas y todos ustedes, para la reforma constitucional del artículo 3º para las leyes secundarias en materia educativa.
Creo que además, el esfuerzo que se hizo de Parlamento Abierto nos ayudó a incorporar en la ley muchos temas que eran de interés de diferentes grupos, y que aquí en el Senado se analizaron y se incluyeron, de manera que se enriqueció con el trabajo el Senado de la República, tanto la reforma constitucional como las leyes secundarias.
Seguí los debates que protagonizaron y aprendí de sus argumentaciones para defender las reformas, y la promulgación de las leyes secundarias.
Hoy, gracias a su labor, y gracias a su votación, como ustedes lo manifestaron en el Pleno del Senado, quedó abrogada la reforma de 2013 y tenemos un cuerpo muy robusto de leyes que, complementadas con la ley que estamos en este momento por terminar, que es la Ley General de Educación Superior, tendremos ya todo el paquete legal para la transformación de la educación pública en México; desde educación inicial hasta educación superior.
Gracias a los cambios que se dieron en la legislación, hoy es claro y creo que todas y todos ustedes que están cerca de las escuelas en sus estados, lo pueden percibir, hoy se percibe un ambiente de convivencia totalmente diferente en el sector educativo; pues todos los actores involucrados en el proceso fueron escuchados y atendidos.
Y, si uno habla con las maestras y los maestros, que están todos los días frente a grupo, verán que han cambiado su forma de pensar sobre la autoridad educativa, de una autoridad que las y los perseguía, a una autoridad que está apoyándolos.
Tan sólo el año pasado, por gestiones administrativas se benefició a más de 400 mil maestros, que tenían trámites, que tenían muchos temas detenidos. La administración de la Secretaría está buscando ponerse al servicio de los maestros.
Como ejemplo solamente, el año pasado se basificó a 175 mil maestros que llevaba más de 10 años sin su plaza, sin su seguridad en el empleo; no obstante estar totalmente acreditados frente a grupo.
INTERVENCIÓN: ¿Más de cuántos?
SENADOR RICARDO MONREAL: Ciento setenta y cinco mil.
SECRETARIO ESTEBAN MOCTEZUMA BARRAGÁN: Ciento setenta y cinco mil plazas.
Hoy se percibe, por ello, un ambiente distinto. Y, el reto que tenemos es consolidar el proyecto educativo del Presidente Andrés Manuel López Obrador y de la Cuarta Transformación.
Para ello, es fundamental comunicarles lo que estamos realizando en la Secretaría para cumplir e implementar la reforma constitucional y las leyes. La parte más importante, es fundamental tener buenas leyes, pero es más importante implementarlas, y eso es lo que estamos haciendo desde principios de año.
En la Secretaría, al igual que ustedes, estamos convencidos de que la base para cambiar nuestra sociedad es precisamente la educación. Lo que sucedió en Torreón, Coahuila, y antes en Monterrey, lo que está sucediendo en materia de cambio climático, todos los indicadores que tenemos del futuro de la sociedad, nos hablan de que, o cambiamos las cosas o vamos realmente a tener problemas muy serios, algunos de ellos insalvables.
Y, como dice el señor Presidente, el cambio tiene que ser un cambio cultural, un cambio de moralizar a la sociedad, un cambio que nos implica a todos transformar los valores que tienen nuestras niñas, niños, adolescentes y jóvenes, y con ello también la de sus padres.
Les quiero compartir algunas de las acciones fundamentales que tenemos, que estamos realizando en estos momentos, para lograr lo que les estoy comentando.
En primer lugar, la actualización, el cambio, la reelaboración de los planes y programas de estudio para que sean compatibles precisamente con la nueva legislación.
El compromiso es tener una primera etapa listos para mayo de este año, porque tenemos que cambiar todos los contenidos, y además imprimir los libros de texto antes del mes de julio.
Los primeros materiales obviamente son los de civismo, ética e historia, que además recuperan contenidos locales.
En civismo, queremos que todos los niños y niñas de México conozcan sus derechos pero que también conozcan sus responsabilidades; que tengamos una conciencia crítica, un pensamiento crítico en ellos y que podamos impulsar una nueva moral social.
De esta manera, iniciaremos un proceso de formación de la mexicana y el mexicano que queremos en la educación, que en primer lugar debe ser mexicanas y mexicanos incorruptibles, con valores, con identidad y que contribuyan al bienestar de toda la sociedad, no sólo al propio.
Esta acción se complementa con la entrega y distribución que hicimos de 176 millones de ejemplares de libros de texto gratuito, en donde por primera vez se priorizó a los pueblos y comunidades indígenas.
Estamos implementando lo que llamamos estrategias transversales, como la activación física, la práctica del deporte, el arte y la música, porque necesitamos también cuerpos sanos en mentes sanas.
Promovemos el desarrollo artístico de los educandos, con la creación de orquestas sinfónicas y de coros infantiles y juveniles que ya empezamos este año y este año vamos a concluir con 120 orquestas, cada una de 200 integrantes; lo que significa casi 25 mil niños.
Como parte de una de las prioridades de este Gobierno, se han entregado, como ustedes saben, becas a estudiantes de educación básica, media superior y superior, de manera directa, sin intermediarios.
El año pasado, con las becas para el bienestar Benito Juárez, fueron beneficiados 6.2 millones de becarios entre 0 y 15 años. Además, 3.5 millones de estudiantes de educación media y superior, porque ahí la beca es universal, y 300 mil en formación universitaria.
Esta política, para contribuir a la permanencia, a la continuidad y a la conclusión de los estudios de nuestras niñas, niños, adolescentes y jóvenes, ha sido propuesta para reconocerla como un derecho en el artículo 4º constitucional por el Presidente López Obrador, y esperemos que sea aprobado por este órgano legislativo en la legislación correspondiente.
Para contar con mejores educandos, debemos tener también mejores maestros. Por ello, es que las reformas en materia educativa parten de revalorar al magisterio, como profesionales de la educación y las acciones que venimos realizando, van en este sentido.
Quiero comentarles que todas las semanas viajo cuando menos a dos estados y me reúno directamente con maestras y maestros, con supervisores y directores; y nos hemos encontrado con muchos problemas.
El domingo pasado en Guadalajara, en reuniones con supervisores, me decían en todas las mesas en las que estuve sentado hablando con ellos, de escuelas con plantilla incompleta.
Me decían de muchos maestros que tenían interrumpido desde hace dos o tres años el pago de alguna de sus prestaciones.
Me hablaban de muchos temas que no están al día y por eso vamos a tener que hacer un enorme esfuerzo administrativo, un enorme esfuerzo de ordenamiento para que, cuando menos, las escuelas tengan lo que les corresponde, que es una plantilla completa, que es el pago siempre permanente de sus ingresos a tiempo, que es un tratamiento claro cuando alguna maestra, por alguna razón, puede pedir alguna licencia y que se cubra de inmediato su posición.
Muchos temas que nos obligan a realmente meternos a fondo dentro del sistema.
El Presidente de la República, ha sido muy claro en eliminar la venta de plazas, el influyentismo y la corrupción en su asignación. Es decir, lo que nosotros hemos llamado el huachicol educativo.
Y, para esto, es que, con las leyes que aquí se aprobaron, tenemos ya el mecanismo para poder transparentar todo el proceso de asignación de plazas.
Recuerden ustedes que hablamos de una caja transparente y de asignaciones públicas, en donde se logre precisamente evitar cualquier opacidad.
Las leyes secundarias fijan con claridad los ámbitos de competencia, tanto del Estado mexicano como de los sindicatos, y queda clarísimo que el Estado es el rector en educación, asume el control de las plazas en todo momento, mientras que los sindicatos actuarán en lo que les corresponde, que es la defensa de los derechos laborales. No menos, pero tampoco más.
Una vez aprobadas las leyes, como ustedes saben, comenzó a operar el sistema abierto y transparente de plazas, donde se van registrando las vacantes de docencia, dirección o supervisión.
Estas vacantes se registran en un sistema abierto y cualquier persona que quiere competir por esa vacante, entra, cubre los requisitos y se postula para el cargo.
Estas van a ser asignadas por primera vez mediante este sistema que denominamos La Caja Transparente, en un evento público entre julio y agosto de este año.
Asimismo, en diciembre pasado se publicaron los nuevos lineamientos para los procesos de admisión, promoción y reconocimiento, donde se prioriza la experiencia, los conocimientos que contribuyan al desarrollo integral del educando.
Las convocatorias se publicarán en febrero y para el mes de agosto tendremos nuevos docentes, mejor preparados y listos para compartir sus conocimientos en la nueva escuela mexicana.
Cambiamos el paradigma de la evaluación punitiva a la formación y capacitación constante del magisterio, mediante el apoyo de la evaluación diagnóstica.
A ese modelo se sumará la programación estratégica para conocer la demanda futura de docentes, de acuerdo con las necesidades de la población.
Hay una sincronía entre los egresados de las normales y el número de maestros que requiere cada región de la República y cada entidad de la República.
Necesitamos una planeación que nos permita ir viendo cuántos maestros tenemos que preparar para que cuando salgan tengan empleo y no entren, en algunos estados, a un sistema saturado y en otros estados pues que hagan falta maestros.
Este modelo precisamente tendrá una programación estratégica para conocer estos datos y esta programación incluirá un nuevo modelo de admisión a las escuelas normales, a la Universidad Pedagógica Nacional y a los Centros de Actualización del Magisterio, para asegurar que los jóvenes que ingresen tengan vocación de docencia y al egresar estén lo suficientemente preparados para hacerse cargo de la educación de nuestras niñas y niños.
Lo anterior será complementado con la actualización de los planes y programas de estudio de las propias escuelas normales, que comenzaremos en el 2021, los cuales diversificarán las especialidades de formación.
Hoy un normalista estudia lo mismo, no obstante que pueda dedicarse a una escuela multigrado, una escuela de tiempo completo, a un nivel educativo determinado.
Por eso vamos a especializar desde la Normal los estudios para también dar mucha fuerza a la educación inicial, como todos y todas ustedes saben, queremos apoyar la educación de los de cero a cinco años, que es el momento clave para una niña o un niño para desarrollar sus habilidades cognitivas y para ello tenemos que preparar también a nuestros docentes.
Y prepararlos también en educación inclusiva, con objeto de que podamos tener maestros que sepan, por un lado, tratar temas específicos como la educación especial, tanto de alumnos con algún tipo de discapacidad, como de alumnos sobresalientes que requieren también una atención distinta, además de incluir un tema muy importante y que ha estado abandonado, que es la educación indígena.
De igual manera estamos convencidos que para contar con mejores resultados, además de mejores maestros, necesitamos mejores escuelas.
Por tal motivo, en las entidades federativas se ha iniciado el Programa La Escuela es Nuestra, bajo un modelo basado en la confianza directa en la comunidad escolar, como una muestra clara de que los cambios se deben de hacer con la participación comunitaria.
Se ha logrado beneficiar a 22 mil 191 escuelas al día de hoy, con un monto de 21 mil millones de pesos y los comités escolares de administración participativa, que son comités en donde están el director, maestros, madres y padres de familia y alumnos de cuarto año para arriba que intervienen directamente para dignificar las escuelas.
Ellos deciden en qué invertir, ellos deciden si quieren construir algo, mantener algo, equipar, de manera particular en aquellas situadas en regiones rurales y urbanas de alta marginación, son las que tuvieron la prioridad en la entrega de los recursos.
Para este año se tiene proyectado que La Escuela es Nuestra llega a casi 20 mil planteles educativos, con una inversión adicional de 3 mil 458 millones de pesos.
Estos son ejemplos de acciones concretas que estamos realizando en la Secretaría, impulsando lo que llamamos un Nuevo Acuerdo Educativo Nacional.
Este Nuevo Acuerdo Educativo Nacional se basa en un permanente y constante diálogo con todos los actores educativos, donde se prioriza el derecho a la educación como motor del cambio social.
para completar este trabajo tenemos una tarea adicional qué cumplir en el ámbito legislativo, que es la obligación de garantizar la educación desde inicial hasta superior. Derivado de ello se tiene como plazo este mismo año, aunque ya vamos muy aventajados para que el Congreso de la Unión pueda aprobar la Ley General de Educación Superior.
Y el reto no es menor, pues actualmente en ese tipo educativo se registra una matrícula cercana a 4 millones de jóvenes en la modalidad escolarizada, mientras que en la no escolarizada se cuenta con una inscripción superior a los 641 mil estudiantes, sin considerar el postgrado.
La cobertura actual es de 39.7 por ciento, de la población que debiera cursar este tipo educativo. El año pasado era de 38.2, de manera que lo logramos aumentar en 1.5 el año pasado.
La meta para finales de la actual administración es alcanzar el 50 por ciento, que nos colocaría dentro de estándares internacionales altamente satisfactorios.
En este sentido se está trabajando en un documento básico con distintos sectores interesados para que esta soberanía, en el momento en que así lo decida, le dé el trámite legislativo correspondiente y que sea la Cámara de origen de la Ley General de Educación Superior.
La visión que tenemos es que la educación superior es integrante de una comunidad educativa, la cual debe estar en diálogo constante con los otros niveles.
Estamos formando un Sistema Educativo Nacional, que incluye a todos los niveles, desde inicial hasta superior, pública o privada. Lo importante es tener un solo sistema que se refuerce, que tenga sinergias y en este sentido hemos iniciado una conversación que no existía.
Los rectores de educación superior y los maestros de educación superior están hablando con los de preparatoria y media superior, para que en vez de solamente criticar que llegaban sin saber matemáticas, puedan preguntarse que se debe de hacer en matemáticas, en educación media superior, para llegar mejor preparados a la superior.
Pero también, están platicando con preescolar, de manera que sepamos que hacer desde el inicio y veamos todo el sistema como un flujo único y no como lo es en estos momentos, que son niveles que están separados totalmente con autonomía el uno del otro y sin una conversación que ayude a mejorar.
Lo anterior se logrará al construir un instrumento jurídico para que el Estado cumpla precisamente con su obligación de garantizar esta cobertura universal.
Esto será posible si proponemos medidas para evitar la deserción y abandono de los estudios, además para facilitar la continuidad y regreso oportuno de los educandos.
Estamos pensando en caminar hacia un Registro Nacional de Opciones de Educación Superior. Todo mundo ha escuchado del rechazo de las universidades a muchos jóvenes, que es de alrededor de 200 mil al año.
El año pasado logramos, de esos 200 mil, darle opciones a 50 mil, solamente con información, solamente diciéndoles a estos jóvenes que otras oportunidades había, en que otras universidades y con esto pensamos llegar a rechazo cero al finalizar el sexenio.
También, llevamos a cabo un ejercicio en donde todos los activos, infraestructura, maestros, planes y programas de dos universidades, la BUAP y el Politécnico, lo metimos a un análisis con unos algoritmos que dan por resultado la utilización de todo lo que tiene una universidad y gracias a ello se logró incrementar, sin invertir un peso, la matrícula de la BUAP en 10 por ciento y del Politécnico en 11 por ciento en su nivel inicial.
De igual forma, delinear los principios de la educación superior entre los que destacan el interés superior en el aprendizaje de jóvenes y adolescentes, equidad y excelencia en educación, respeto a la autonomía universitaria y libertad de cátedra, e interculturalidad y una orientación integral que eduque para la vida y no sólo para el empleo.
También, que aporte soluciones para contar con espacios libres de violencia y de discriminación en los recintos universitarios, de manera especial la que se ejerce contra las mujeres.
Debemos materializar un Sistema Nacional de Educación Superior que reconozca tres subsistemas: el universitario, el tecnológico y el de escuelas normales e instituciones de formación docente.
En este último, poner énfasis de manera especial en el perfil de los egresados de dichas instituciones para contribuir a la formación integral del mexicano que queremos en la nueva escuela mexicana.
Por otra parte, es necesario contemplar medidas para que todas las instituciones públicas de educación superior tengan reglas para el ejercicio de los recursos públicos con austeridad, eficiencia, transparencia y que rindan cuentas.
Uno de los temas importantes, como los que nos encontramos, fue la virtual quiebra de alrededor de nueve universidades públicas autónomas y hemos estado viendo con ellos un plan de apoyo, pero a cambio de un plan en donde se comprometan a ser más austeros, en donde sean más cuidadosos con las negociaciones laborales, en donde sean más agresivos en la generación de recursos propios a través de la investigación, en el desarrollo y la relación con la planta productiva.
Sin olvidarnos de diversificar las ofertas de egreso de la educación superior, la coordinación con la autoridad educativa federal para los planes y programas de estudio que se impartan en las instituciones particulares, además de las reglas para el otorgamiento de las becas que dispone la Ley General de Educación, las autorizaciones o RVOES, como se conocen.
Queremos, en esta Ley que estamos elaborando, lograr poner un alto a las universidades patito, porque muchísimos jóvenes invierten sus ahorros, su esfuerzo, su esperanza en un estudio universitario, pensando que están en una buena universidad y ésta no cubre los mínimos estándares.
Entonces, una de las cosas que queremos es certificar para saber cuando una persona entra a la universidad, que está entrando a una institución que le va a dar lo que promete, todo ello en un marco que permita una colaboración interinstitucional y una corresponsabilidad social donde la educación superior sea parte del proceso de mejora continua de todo el Sistema Educativo Nacional.
Senadoras y senadores:
El apoyo que ustedes nos han dado ha sido fundamental para contar con bases jurídicas sólidas, que den certeza a la educación de nuestras niñas, niños, adolescentes y jóvenes en nuestro país.
Debemos de tener claro que la única medida del éxito de un sistema educativo es el aprendizaje de nuestras niñas y niños, y no es un aprendizaje solamente académico, es un aprendizaje, también, en cuanto a su conducta, en cuanto a sus valores, en cuanto a su responsabilidad hacia los demás y su solidaridad con los otros.
Hoy tenemos un cambio de rumbo en materia educativa muy clara y les invito, respetuosamente, a que sigamos trabajando en ese camino para profundizarlo y llegar a buen puerto.
En la Secretaría de Educación Pública siempre van a encontrar una dependencia con voluntad de trabajar, de escuchar, de aprender de ustedes, de dialogar, y por ello nos da muchísimo gusto siempre sumar esfuerzos en esta sinergia nacional a favor de la educación de México, construyendo el nuevo Acuerdo Educativo Nacional.
Muchísimas gracias.