Muchas gracias.
Quiero felicitar a los senadores y a la compareciente por este ejercicio franco, este ejercicio directo, este ejercicio de intercambio de preguntas y respuestas.
Creo que ha sido rico en opiniones y también ha sido importante el que se desarrollara esta comparecencia, previo a la plenaria.
Nosotros sostenemos, y haré una reflexión a manera de comentario, nosotros consideramos que las reservas internacionales, en efecto, son activos financieros que el Banco Central invierte en el exterior.
Su objetivo central es contribuir a la estabilidad de precios cuando se presenta una reducción severa de los flujos comerciales o de capital de balanza de pagos, que se presenta por desequilibrios macroeconómicos o financieros, internos o externos.
Y la Comisión de Cambios es la única facultad para decidir sobre el uso de las reservas internacionales.
Lo contrario a una política macroeconómica sana, sería la utilización de las reservas con fines de pago, de amortizaciones de deuda pública o de gasto público. Sería incorrecto y se aumentarían los niveles de vulnerabilidad en la economía.
Eso es lo que capté y lo que entendí con mucha seriedad de la compareciente, la maestra Victoria Rodríguez.
Por eso no podemos de ninguna manera poner en riesgo los niveles de la economía, ni tampoco hacerlos vulnerables en la percepción de riesgos por parte de los mercados y de los actores económicos.
Yo quiero decirlo contundentemente, las reservas son un indicador importante de la capacidad de pago que tiene el país para hacer frente a sus compromisos en moneda extranjera y también de la solidez del propio Banco Central.
Las reservas internacionales promueven la confianza de los agentes económicos respecto de la fortaleza financiera de la economía del país y facilitan el acceso a los mercados internacionales de capital en condiciones favorables.
Por eso nos queda muy claro que las reservas internacionales sirven para que el Gobierno Federal y los particulares puedan cumplir sus compromisos en monedas extranjeras, tales como la amortización y el pago de intereses de la deuda externa acumulada para el pago de las importaciones de bienes y servicios; para los depósitos de las cuotas que tenemos asignados en los organismos financieros internacionales y para el pago de transferencias en moneda extranjera derivada de inversiones extranjeras directa o de cartera en nuestro país.
Así como también para la venta de dólares a través de mecanismos para reducir el ritmo de acumulación de reservas internacionales.
Por esta razón, por esta significación, entre otras razones relevantes, me alegra mucho la posición de Victoria, que resalta la necesidad de cuidar de nuestras reservas internacionales y garantizar que por ningún motivo se disponga de ellas de ninguna manera, sino de acuerdo con la ley.
El compromiso es importante y por eso me alegra su seriedad, su responsabilidad y su cuidadosa acepción y respuesta a cada una de las interrogantes que aquí hemos escuchado y hemos dado seguimiento.
La felicito y bienvenida de nueva cuenta, maestra Victoria Rodríguez Ceja, y muchas gracias a senadoras y senadores de la Comisión de Hacienda.
Buenas tardes.