- Servirá de palanca para reactivar la economía en diversos sectores y dará certidumbre tanto al comercio como a las inversiones, asegura.
La presidenta del Senado de la República, Mónica Fernández Balboa, afirmó que con el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), nuestro país contará con una herramienta para enfrentar las dificultades económicas, derivadas de la pandemia por el Covid-19.
Dijo que con la entrada en vigor de este instrumento internacional, este primero de julio, México avanza hacia una mayor integración con la región de América del Norte, que es una de las más amplias y competitivas en todo el mundo.
El Tratado, aseguró, servirá de palanca para reactivar la economía en diversos sectores y dará certidumbre tanto al comercio como las inversiones adecuadas entre los socios de América del Norte.
Las empresas nacionales y extranjeras verán en el país una oportunidad para hacer más negocios, lo cual se traducirá en nuevas oportunidades de empleo, sobre todo, para aquellos que se han visto más afectados por la panadería, acotó.
La senadora señaló, en un vídeo que publicó en sus redes sociales, que habrá empleos mejor remunerados, en condiciones que provocarán una mayor justicia laboral.
Explicó que con el T-MEC se pondrán en marcha mecanismos que ayudarán a solucionar controversias comerciales, de una manera equitativa y basada en derecho. También se incorporarán nuevas reglas de origen que fortalecerán la integración de las cadenas de valor en la región, añadió.
En el Senado de la República, remarcó Mónica Fernández Balboa, “vemos con mucho optimismo la puesta en operación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá. Seguiremos puntualmente la correcta implementación del T-MEC durante los próximos meses, con la intención de que se aprovechen todas las ventajas que ofrecen en beneficio de las y los mexicanos”, abundó.
Resaltó que 26 años atrás, con la puesta en marcha del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, marcó el inicio de un proceso de modernización comercial en el país, que provocó crecimiento económico y desarrollo para muchos mexicanos.
En este periodo, los intercambios comerciales con Estados Unidos crecieron seis veces y con Canadá casi ocho veces. En consecuencia, México se consolidó como una potencia exportadora, con claros beneficios y con múltiples oportunidades hacia adelante, refirió.
Gracias a la inserción de nuestro país en la economía mundial, mediante las cadenas globales de valor, fue posible modernizar la planta productiva manufacturera nacional, además de los sectores agropecuario y agroindustrial, consideró la senadora.
También reconoció que aún persisten los retos, sobre todo para incluir a más sectores y regiones del país a la actividad económica vinculada al exterior, especialmente a las pequeñas y medianas empresas.
Si se avanza en estos retos, dijo Mónica Fernández, México logrará un crecimiento más incluyente en todas las regiones del país. En ese sentido, apuntó, debe ser una prioridad lograr que este crecimiento sea sostenible hacia el futuro, lo cual es posible mediante el aprovechamiento de las tecnologías y la economía digital, cuyo potencial se ha hecho más evidente a raíz de esta lamentable pandemia.
En un entorno internacional cambiante y de incertidumbre a causa del Coronavirus, continúo, nos enfrentamos como sociedad a una crisis sanitaria sin precedentes, cuyo mayor desafío es proteger las vidas humanas.
“Ello nos ha llevado a tomar decisiones difíciles, pero necesarias, que a su vez han impactado negativamente en nuestras economías”, expresó.
“Con el T-MEC, México contará con una herramienta para enfrentar con una mejor disposición las dificultades económicas”, remarcó.
La senadora agradeció y felicitó a todas las personas que aportaron un granito de arena para que el nuevo tratado se convierta en el mejor tratado posible para México, al equipo negociador, a las y los legisladores de ambas cámaras, a las partes del Poder Ejecutivo, a las cámaras empresariales a las organizaciones sociales que estuvieron involucradas.