Senador Cuauhtémoc Ochoa Fernández, presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público.

Compañeros y compañeros senadores, la Ley de Ingresos para el Ejercicio Fiscal 2025 es una declaración de principios y compromisos con el pueblo de México. La Ley de Ingresos 2025, la primera de este sexenio, es una hoja de ruta que refleja nuestra visión de justicia social, sostenibilidad financiera y crecimiento con bienestar.

Es el resultado de una manera diferente de gobernar, priorizando siempre a quienes más lo necesitan. Esta propuesta reafirma nuestra convicción de garantizar un crecimiento económico equilibrado, sostenible y justo, con un enfoque prioritario en la reducción de las desigualdades y la mejora de la calidad de vida de todas y todos los mexicanos. Es decir, esta propuesta refleja responsabilidad fiscal con justicia social, prioriza la austeridad republicana, la disciplina fiscal y el fortalecimiento de un modelo de economía moral centrado en el bienestar de todas y todos.

En especial, garantizando los programas sociales, consagrándolos como derechos innegables en nuestra Constitución. Esta propuesta de ley no contempla en términos reales la creación y el incremento de nuevos impuestos. Esto refleja nuestro compromiso de impulsar la economía sin cargar más a las y los contribuyentes.

Para 2025 se proyecta un ingreso total de 9.3 billones de pesos, con ingresos presupuestarios de 8 billones 55 mil 649.3 millones de pesos, lo que representa un incremento del 5.4% en términos reales respecto a 2024. En este sentido, me permitiré hacer el desglose de los principales ingresos.

Impuestos. Se proyecta recaudar 5 billones 297 mil 812.9 millones de pesos gracias al dinamismo de nuestra economía y a los esfuerzos del Gobierno de México para mejorar la eficiencia recaudatoria a través de herramientas como la digitalización, el combate a la evasión fiscal encabezados por el SAT, las aduanas y la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones.

Los ingresos tributarios alcanzarán 14.5% del PIB, nivel sin precedentes, y que demuestra que es posible aumentar la recaudación reforzando la eficiencia, cerrando espacios a la evasión y a la elusión de grandes corporaciones que por años se beneficiaron de privilegios fiscales.

Dos. Cuotas y aportaciones de seguridad social. Contribuirán con 603 mil 77.9 millones de pesos, reflejando el fortalecimiento de nuestras instituciones de seguridad social.

Tres. Ingresos por ventas de bienes y prestaciones de servicio. Aportarán 1 billón 500 mil 579 millones de pesos consolidando el papel del sector público en la generación de recursos propios.

Cuatro. Derechos, productos y aprovechamientos. Con un incremento real de 37% respecto a 2024, se proyecta una recaudación de 374 mil 412.7 millones de pesos, reforzando el uso responsable de los recursos estratégicos de la nación.

Cinco. Transferencias, subsidios y pensiones. Se prevé un ingreso de 279 mil 766.8 millones de pesos consolidando nuestro compromiso con el bienestar social. La política de deuda pública prioriza el financiamiento interno con instrumentos a largo plazo y tasa fija, complementando con financiamiento externo en condiciones favorables. Además, se seguirá promoviendo el desarrollo de instrumentos sostenibles vinculados a los objetos de desarrollo sostenible.

Pemex tendrá… El financiamiento total se estima en 1 billón 246 mil 366.5 millones de pesos, lo que le representa una reducción del déficit en dos puntos del PIB respecto a 2024. Pemex tendrá un endeudamiento interno de 143 mil 403 millones de pesos, una disminución de 0.4% en términos reales y externo de 5 mil 512.7 millones de dólares.

La CFE contará con un endeudamiento neto interno de 10 mil 27 millones de pesos y externo de 991 millones de dólares, una reducción de 197 millones respecto a 2024.

La Ley de Ingresos 2025 garantiza los recursos necesarios para proyectos estratégicos como infraestructura para trenes, carreteras, caminos, infraestructura hidráulica, hospitales y clínicas.

En suma, la propuesta que hoy discutimos es la piedra angular de un presupuesto que prioriza los derechos sociales, fomenta el desarrollo de infraestructura estratégica y consolida la soberanía de México.

Esta ley de ingresos reafirma los principios de economía moral, es posible lograr un país con bienestar y al mismo tiempo tener un manejo responsable de la economía.

Es cuanto, señor presidente.

Senador Enrique Inzunza Cázarez, presidente de la Comisión de Estudios Legislativos.

El proyecto de la Ley de Ingresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2025 contempla un estimado de ingresos de nueve billones 302 mil 15.8 millones de pesos, lo que representa un incremento de 235 mil 970 millones de pesos respecto de los nueve billones 66 mil 45.8 millones de pesos registrados en 2024.

Este crecimiento se distribuye a través de diferentes fuentes de ingresos con un enfoque particular en los impuestos, los ingresos derivados de las empresas estatales y las contribuciones por derechos y aprovechamientos.

En este sentido, los puntos torales de la presente ley son los que enumeraré.

Primero, se establece que los ingresos tributarios aumentarán significativamente, en particular los provenientes del IVA y del ISR.

Además, se prevé un incremento en los ingresos de instituciones como la Comisión Federal de Electricidad, IMSS e ISSSTE, reflejando un fortalecimiento del sector público en materia de seguridad y energía.

Segundo, los ingresos por contribuciones, derechos, productos y aprovechamientos también experimentan un aumento significativo. Asimismo, se contempla un incremento en los ingresos de Petróleos Mexicanos.

Tercero, en cuanto a los ingresos derivados de financiamientos, se estima una disminución, lo que refleja una estrategia fiscal prudente. En relación con el endeudamiento.

Cuarto, el proyecto establece que el Ejecutivo Federal, a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, podrá autorizar un endeudamiento neto interno de hasta un billón 580 mil millones de pesos para financiar el presupuesto del próximo año.

Esta medida incluye la posibilidad de contratar créditos, empréstitos y otras formas de financiamiento público, incluso mediante la emisión de valores.

Quinto, se prevé que los ingresos derivados de las empresas de participación estatal mayoritaria, como las administradoras del Sistema Portuario Nacional, se concentren en la Tesorería de la Federación, para ser destinados al Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec. Un proyecto estratégico para el desarrollo económico y logístico del país.

Sexto, en cuanto a los estímulos fiscales, se mantienen beneficios importantes para los contribuyentes que se dedican exclusivamente a actividades agropecuarias. En particular, aquellos que importan o adquieren diésel o biodiésel para su consumo final. Pienso en los productores de Sinaloa, cuyos intereses represento en esta Cámara Alta, y de otros estados.

Asimismo, se propone un estímulo para el sector del transporte terrestre público y privado, incluyendo a las empresas de transporte de carga y pasaje, así como el turístico, que utilicen la Red Nacional de Autopistas de Cuota. Este estímulo consiste en un acreditamiento de hasta el 50% de los gastos realizados en el pago de peajes para contribuyentes con ingresos anuales inferiores a los 300 millones de pesos.

Séptimo, se incluyen reformas fiscales importantes, como la tasa de retención provisional para los ingresos por intereses del sector financiero, o bien el hecho de que las organizaciones civiles y fideicomisos que participen en las labores de rescate y reconstrucción tras desastres naturales, puedan recibir donativos autorizados para financiar sus actividades.

Octavo y muy importante, en el ámbito cultural se propone incrementar los estímulos fiscales para la producción artística, literaria, promoviendo así su crecimiento.

Noveno, en cuanto a la extinción de organismos públicos descentralizados, como la financiera rural de desarrollo agropecuario, forestal y pesquero, los fondos serán destinados a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para utilizarlos en el Fondo de Pensiones para el Bienestar. De este modo, se asegura la continuidad de los programas sociales.

Cierro mi intervención reiterando que este conjunto de medidas busca asegurar la estabilidad, fortalecer las finanzas públicas y promover un desarrollo más inclusivo y sostenible en México.

Al mismo tiempo, se atienden las necesidades de inversión en infraestructura y proyectos estratégicos claves para el país. Seguimos en la ruta de seguir generando prosperidad compartida.