En Querétaro cabemos todas y todos. Nadie tiene derecho a dividirnos por intereses políticos.
Es vergonzoso el mensaje del gobernador del estado de Querétaro, Mauricio Kuri, quien desde un evento partidista hizo un llamado explícito a no votar por Morena, habló de condicionar la residencia de personas que lleguen a vivir a esta entidad, a que no voten por morena.
Este mensaje no solo es irresponsable por tratarse de un servidor público que debe ser institucional y gobernar para todas y todos sin colores, sino que además vulnera el derecho de hombres y mujeres a elegir libremente su forma de gobierno (Artículo.39 Constitucional). También transgrede la libertad de las y los mexicanos de movilizarnos en el territorio nacional y elegir libremente nuestro lugar de residencia sin condicionamientos (Art.11 Constitucional). No se puede intervenir en la voluntad popular evocando el respeto a la ley y al mismo tiempo violando la Constitución y las leyes electorales.
Su mensaje fue también profundamente ingrato, porque ha sido precisamente el Gobierno Federal, emanado de Morena y hoy encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, quien ha respaldado con hechos concretos el desarrollo de Querétaro y el país. Gracias a la visión humanista de la cuarta transformación, los hogares de queretanas y queretanos cuentan hoy con apoyos sociales que se han convertido en derechos constitucionales y hay proyectos de infraestructura de suma importancia como el tren México–Querétaro que encabeza el gobierno federal, que impactarán de manera positiva en el desarrollo de nuestra entidad.
Mientras Morena trabaja por la inclusión y el bienestar de todos los mexicanos — sin importar su lugar de origen ni su ideología—, la oposición prefiere sembrar división y con clasismo, racismo y prepotencia quieren imponer su pensamiento como único. Sus palabras evidencian el verdadero temor del PAN: el rechazo social a sus políticas fallidas como la mala inversión de paseo 5 de febrero y la fuerza creciente de nuestro movimiento en el estado.
Y no es un temor infundado. En la pasada elección, Morena y sus aliados ganamos 10 de los 15 distritos locales. El PAN, apenas 2. Ese resultado no se da por casualidad, es reflejo de un pueblo cansado de los privilegios de unos cuantos, del clasismo, el racismo y la exclusión. De gobiernos que solo atienden a quienes votan por ellos, que son represivos y autoritarios.
Como senadora de la República, he sido testigo directo de cómo el Gobierno Estatal niega atención a gestiones legítimas hechas por ciudadanos que no comulgan con su ideología. También he intentado establecer canales de diálogo institucional con distintas dependencias, sin recibir respuesta. Hoy, tristemente, entendemos porque: la consigna es excluir todo lo que no se someta a su visión política.
Desde este espacio quiero informar a la ciudadanía que hemos tratado de trabajar en coordinación con el gobierno estatal , fui atendida por el secretario de gobierno Lic. Carlos Alcaraz, quien me ofreció mesas de trabajo con las personas que solicitaron mi gestión por afectaciones de diversa índole y hasta hoy ninguna petición ha sido atendida, ni se me ha dado fecha de reunión.
Este no es el Querétaro que queremos. Queremos un Querétaro donde gobernar signifique atender, representar con dignidad y escuchar al pueblo, administrar responsablemente el recurso público y hacer equipo con la gente para acabar con la corrupción y la injusticia. Donde se respete la ley, pero también se respete al pueblo. Donde la política se ejerza con honestidad y responsabilidad, sin imposición.
Morena no vino a dividir. Morena vino a transforma. A hacer de Querétaro un estado más justo, más humano, más solidario. ¡Lo vamos a lograr! Porque Querétaro no es propiedad del PAN. Querétaro es hogar de todas y todos los que aman esta tierra y sueñan con un futuro mejor.
Senadora Beatriz Robles
