Yo estoy con ánimo aquí viendo por qué la reacción, ya hasta me va a preguntar que por qué estoy tan calladito, digo es que teníamos que llegar a este punto, ya huyen, ya no quieren ni debatir, ya se les ha acabado la fuerza, como dicen por ahí, pero hay que decir que están muy desinformados. El día de hoy, hace unas horas, se suben a mentir aquí a la tribuna, hace unas horas en una reunión y días antes, Ilan Goldfajn del Banco Interamericano de Desarrollo, viene a hablar con nuestro gobierno de la alegría, de la certeza que tienen sobre el país, en términos de lo que va a ser la relocalización de inversiones, corredores económicos y las mismas calificadoras internacionales que ustedes suben ahorita, pero no tienen ni diez minutos que vienen a decir aquí, en tiempo real es otra la realidad, pero mienten que da gusto, como respiran y es porque añoran los tiempos pasados, cuando la política de ingresos la hacían entregando la soberanía, nuestros recursos naturales, cuando esperaban la dolariza, después de entregarla a través de la Reforma Energética, petróleo, cuando subían los impuestos, el IVA, hasta se han de acordar de la roqueseñal y cómo el PAN siempre iba con el PRI a sacrificar al pueblo, cuando endeudaban, Fobaproa. Entonces, León cree que todos son de su condición, pero estas épocas ya acabaron de irresponsabilidad, de deudas insostenibles y aunque ha costado, se ha ido enderezando el barco.
Ya muchos compañeros les han informado aquí. Yo quiero precisar cómo esta propuesta autoriza a contratar créditos, empréstitos y otras formas del ejercicio de crédito público, hasta por un monto, como han dicho aquí, de un billón 580 mil pesos, monto de endeudamiento racional. Y con la propuesta de ingresos se establece un marco claro que permite planificar y asignar recursos a proyectos y programas sociales, económicos, con una propuesta de crecimiento equitativo y sostenible, reduciendo las desigualdades y asegurando que todos los mexicanos puedan disfrutar de una vida digna.
Eso que ustedes hicieron, pero al revés, masacraron al pueblo. Hasta este momento ustedes, la reacción, en forma segmentada y tendenciosa, presentan argumentos en contra, señalando datos de la economía nacional que, desde su visión conservadora, no justifica cada uno de los conceptos de ingreso o sus correspondientes actualizaciones. Cuestionan el destino que se dará a los mismos en forma panfletaria.
Vean nomás eso, panfletarios. Y yo diría hasta delirantes, como que están en sueños de una realidad que no existe, no va a ser así como ustedes dicen, porque les preocupa ahora sí la deuda nacional, ya que dejaron embarcados a todos los mexicanos. No discuten el origen y las políticas depredadoras de los regímenes políticos que ustedes hicieron para tener al país en esta circunstancia.
Ahora vienen, y aunque uno quisiera que algunos de buena fe, que no la tienen, a querer aquí hacerse los buenitos, esta revisión de argumentos no es razonable, no expresa una visión razonable sobre el desarrollo económico nacional y el destino de los recursos económicos del país. Lo que, de nuestra parte, como Claudia lo propone con un uso racional, austero, honesto y transparente, impulsaremos el desarrollo nacional y avalar una vida digna para los mexicanos y mexicanas. La propuesta de paquete económico contribuye a mantener la estabilidad económica del país, a los límites para el endeudamiento y gestión de las finanzas públicas con austeridad y racionalidad.
Ustedes donde observan aumentos o reducciones injustificadas, nosotros determinamos oportunidades de un gasto más eficiente, eliminando privilegios o desviaciones en su ejercicio. Por eso esta propuesta elimina la discrecionalidad que prevalecía en los gobiernos del PRIAN. Ustedes favorecían a la simulación recaudatoria, eliminaban la obligación fiscal de grandes contribuyentes, en donde el acuerdo de la cúpula política con la empresarial, eso sí garantizaba el desvío de cargas fiscales, afectando los ingresos reales del Estado.
Todavía aquí ese Salinas Pliego que se niega a pagar los impuestos y ese es un verdadero ratero al dinero del pueblo, que ya pague sus impuestos. Voceros ustedes quedan de la negatividad, artificialmente rechazan propuestas en la ley de derechos y ahora en la ley de ingresos, no reconocen que la clave para el éxito de los ingresos radica en la implantación de herramientas tecnológicas que automaticen procesos, que agilicen la gestión de la información y aseguren una correcta integración de datos. La conexión a plataformas gubernamentales seguras y confiables se volverá esencial para realizar trámites con mayor rapidez y seguridad.
La actualización constante del conocimiento sobre las nuevas disposiciones fiscales, el análisis profundo de las implicaciones de las modificaciones a la normativa, la adecuada planeación y el desarrollo de estrategias de cumplimiento son elementos claves para la buena administración pública. Con disgusto de ustedes, Claudia continuará combatiendo la corrupción en todos los niveles de la administración pública federal. Con disgusto de ustedes, no se incrementan los impuestos ni las tasas vigentes, se implementarán operaciones de refinanciamiento y manejo de pasivos para atenuar la volatilidad financiera.
Con discurso y con disgusto de la oposición, de ustedes, se disminuirá el costo del servicio de la deuda y se liberarán recursos para la inversión pública, se incentivará el dinamismo del empleo nivel nacional, fortalecer el consumo privado y estimular la inversión fija bruta. Se aumenta la eficiencia operativa en las aduanas para combatir la evasión fiscal. A través de las modernizaciones de los sistemas de pago de impuestos, mediante el uso de las tecnologías, se fortalecerá la trazabilidad fiscal de las transacciones, lo que permitirá incrementar la capacidad de supervisión, facilitando la recaudación local y federal.
Por eso, la política de ingresos del próximo año mantiene el compromiso del gobierno federal de fortalecer los ingresos del sector público. Es claro que con la propuesta se disminuye la percepción de riesgo, se define un marco fiscal previsible que fomenta la confianza de inversionistas y agentes económicos, atrayendo tanto nacionales como extranjeros. Como ustedes están fuera de la realidad, hoy ni siquiera acuden a la instalación, en este Senado, del proyecto el Transísmico y hoy la coordinadora de empresarios, Altagracia, viene a dar datos que ojalá los revisen, porque fíjense que México es un país que tiene el primer lugar exportador de vehículos pesados, el cuarto de la industria automotriz, el sexto de autopartes, el sexto de turismo, el quinto dispositivos médicos.
Hay muchas industrias que ya nuestra fuerza tiene huella y siempre es más fácil para los que pensaron hacer corredores y polos. Por eso el éxito, por eso la llegada del BID, por eso las calificaciones que a ustedes los traen delirando con pesadillas, pero ¿por qué? Porque perdieron lo fundamental, su cercanía con el pueblo. Ustedes nunca pensaron en el pueblo, nunca creyeron en la democracia, creían que iban a seguir siendo los monarcas, que iban a decidir las cosas, que todos les iban a hacer caso y hoy quedaron en la basura de la historia.
Hay que decirlo como tal, están muy apaciguados, están huyendo, ya no dan el debate, ya no conocen el debate, culmino, no tienen la razón. Y es claro, reitero, que la ley de ingresos aumentará, les guste o no, la eficiencia recaudatoria, bajará la evasión, la elusión fiscal, combatiremos la corrupción y brindaremos una mejor atención a los contribuyentes. Por el bien de la nación, primero los pobres y mucho ánimo, no se agüiten, hombre. Animo.
