
Honorable Asamblea, quiero hacer un breve informe.
Es público que el Instituto Nacional Electoral, o que desde el Instituto Nacional Electoral, se ha abierto una controversia con la Cámara de Senadores.
En lo personal, yo no tengo problema en un debate público sobre este tema. Y entiendo cualquier debate político sobre el mismo.
Lo que esta Presidencia no puede aceptar es la descalificación que la Cámara de Senadores ha hecho de manera institucional de un trabajo profesional como auxiliar del órgano electoral.
Fue público que el Comité de Evaluación del Poder Legislativo se desempeñó con seriedad, con profesionalismo, con entrega, haciendo un esfuerzo enorme.
Es público que la Mesa Directiva tuvo que tomar la tarea que le asignó el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ante la determinación del Comité de Evaluación del Poder Judicial de no culminar el proceso de selección de candidaturas que le correspondía. Y, por lo tanto, áreas tan diversas como servicios parlamentarios, servicios jurídicos, servicios de trabajo en cómputo, de análisis de sistemas, hasta de limpieza, diría yo, han trabajado de manera destacada, servicios administrativos, oficialías de partes, para cumplir con la responsabilidad y generar las condiciones para que el próximo domingo, primero de junio, el pueblo de México elija por el voto universal, secreto y directo a las personas juzgadoras.
Así es que quiero hacer dos precisiones.
Primero, que esta Presidencia de la Mesa Directiva entregó el 12 de febrero, en tiempo y forma, los listados de candidaturas del Poder Ejecutivo, del Poder Legislativo y del Poder Judicial. Entregó 1,428 candidaturas del Poder Ejecutivo, 956 del Poder Legislativo, 1,416 del Poder Judicial, 1,759 incluyendo las personas juzgadoras que tienen pase directo.
Así es que es falso que esta Cámara de Senadores haya entregado fuera de tiempo los listados de las ministras de la Corte que decidieron participar con pase directo en la elección del próximo domingo, primero de junio. Quiero precisar que las diferencias que ha habido con el INE se deben a que el INE paró su tarea por más de un mes y apenas el 30 de enero nos mandó un oficio pidiéndonos cómo le entregáramos la información para facilitar la tarea de la organización de la elección. Dentro de la información que nos solicitó, esa información no está en los requisitos constitucionales ni de la convocatoria.
Son elementos prácticos, entendibles y necesarios como un teléfono o un correo electrónico de las personas candidatas, pero no teníamos la obligación de hacerlo y, sin embargo, el Comité de Evaluación del Poder Legislativo lo hizo y entregamos todo en tiempo y forma. El viernes 13 de febrero me comuniqué con las autoridades del INE, una vez que emitió el oficio pidiéndonos información y se reconoció que había sólo 12 casos, yo le dije no, son 14, que faltaba algún teléfono o algún correo electrónico. El sábado 15 de febrero se entregó esos casos y se entregó la información completa del Poder Ejecutivo.
Nosotros lo dijimos por escrito y lo decimos desde esta Presidencia, no tenemos ninguna manera de entregar los datos correspondientes al Poder Judicial, que se ha negado reiteradamente no sólo a dar la información, sino que es público que ha hecho todo lo posible por evitar o por lo menos por descarrilar o mínimo por deslegitimar el proceso de elección de las personas juzgadoras. Hago estas aclaraciones desde la mesa directiva, dado el debate que se ha hecho y quiero cerrar planteando que el caso, por ejemplo, que se ha tomado como emblemático de una magistrada que dice haber renunciado a su participación y que nosotros la incluimos incorrectamente, es también, por decirlo suave, inexacto. La magistrada Lilia Mónica López Benítez renunció a su elección como magistrada, que es en 2027, pero no renunció a su pase directo del Consejo de la Judicatura al Tribunal de Disciplina Judicial.
Y aquí muestro el anexo 2, que está a su disposición, donde se incluyen los nombres de las tres ministras de la Corte que decidieron sí tomar el pase directo para el proceso electoral y que fue entregado en tiempo y forma el 12 de febrero. Así es que rechazo categóricamente las descalificaciones realizadas hacia la tarea institucional de la Cámara de Senadores, asumo cualquier crítica que quieran hacer al proceso mismo en algún hierro que haya tenido y hago un reconocimiento al personal de la Cámara de Senadores y a su Comité de Evaluación por la extraordinaria tarea que realizaron en un proceso inédito, histórico, que no tenía un camino construido y que a pesar de eso va avanzando con toda firmeza y que, por supuesto, el proceso electoral se va a llevar a cabo aunque a algunos les disguste. Pasamos al siguiente punto. Honorable Asamblea, les informo que tenemos la visita de un grupo de alumnos de la Maestría de Seguridad Nacional del Centro de Estudios Superiores Navales de la Secretaría Marina, quienes acuden a la conferencia El Trabajo Legislativo de la Cámara de Senadores con respeto.