Grupo Parlamentario MORENA, LXVI Legislatura

Consulta Marcelo Ebrard al Senado sobre eventuales cambios al T-MEC

  • Integrantes de la Mesa Directiva y la Jucopo sostienen reunión con funcionarios federales; se trató de un encuentro inédito, señalan legisladores.
  • México no aceptará cambios propuestos por EU en materia laboral ni en el acero y aluminio.

En una reunión inédita, el Senado de la República fue informado y consultado por el Secretario de Relaciones Exteriores y el equipo negociador mexicano, sobre los avances en los cinco temas que se negocian en Washington, que podrían derivar en eventuales cambios al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

La presidenta de la Mesa Directiva, Mónica Fernández, integrantes de la Junta de Coordinación Política, encabezados por Ricardo Monreal, y de las comisiones de Relaciones Exteriores, y de Relaciones Exteriores América del Norte, sostuvieron una reunión informativa con el canciller Marcelo Ebrard, la secretaria de Economía, Graciela Márquez, y Jesús Seade, jefe del equipo negociador mexicano.   

Posteriormente, se ofreció un mensaje a los medios de comunicación, donde el senador Ricardo Monreal destacó que se trató de una reunión informativa inédita, plural y de respeto. Reconoció la actitud del Ejecutivo para esta conversación, que “nos llena de optimismo, no desbordado, pero sí razonado”. 

Dejó en claro que este encuentro no sustituye el proceso legislativo para analizar, y en su caso, aprobar las posibles enmiendas al T-MEC. Vamos a esperar los tiempos formales en los próximos días para que nos comuniquen por los conductos oficiales sobre el protocolo de enmiendas, agregó.

Resaltó que fue muy oportuno y correcto que el Tratado haya sido ratificado por el Senado hace varios meses. Si no se hubiese dado así, estaríamos discutiendo en este momento aspectos torales del mismo. Ahora no y se acotan sólo los temas que comentó el Canciller. 

El legislador de Morena comentó que esos puntos son los únicos que la Cámara de Senadores autoriza a ser negociados, hasta formalmente recibir la comunicación y el protocolo de enmiendas.

Al respecto, la presidenta de la Mesa Directiva, Mónica Fernández Balboa, reiteró la importancia de este ejercicio, pues por primera vez el Ejecutivo consultó al Legislativo sobre el estado de las negociaciones internacionales en proceso.

Agradeció la disposición de los secretarios presentes, así como de los integrantes de cada uno de los Grupos Parlamentarios. Además, resaltó que esta reunión de intercambio de información y posicionamientos se realizó con una actitud responsable para acompañar al Estado mexicano en la firma de este tratado. 

Informó que la Cámara Alta está en la mejor disposición para colaborar con el Ejecutivo y estará atenta a los resultados por si es necesario discutir y aprobar algún nuevo acuerdo en relación. “Este Senado de la República va a estar atento todo el tiempo para poder hacer la tarea de análisis responsable que nos corresponde”, apuntó.  

En tanto, Marcelo Ebrard expuso las “líneas rojas” que configuran la posición mexicana sobre los temas laboral, ambiental, acero y aluminio, medicamentos biogenéticos y paneles de resolución de controversias, que “son en esencia los elementos que configuran la posición mexicana que será transmitida en la próxima hora a la contraparte norteamericana y de Canadá”, agregó. 

Precisó que no se admitió ningún otro tema, porque el 90 por ciento del Tratado no está sujeto a discusión o a revisión, “lo que vamos a tener es un adendum el cual será con estas líneas rojas”.

Indicó que se llevó a cabo una consulta con los senadores y se compartieron con la Junta de Coordinación Política las decisiones primordiales que México comunicará a su contraparte con Estados Unidos y Canadá.

El Secretario destacó que nunca se había realizado una consulta al Senado y a todas las fuerzas políticas en una negociación en curso de este tamaño. Creo que es un hecho mayor y quiero agradecer la seriedad y profesionalismo de todas y todos los senadores que han estado presentes. Nos llena de optimismo y esperanza para defender adecuadamente la postura de México en las próximas horas, concluyó.

Explicó que en esta reunión se consultó el planteamiento de inspecciones directas o fórmulas de presencia de funcionarios de Estados Unidos en territorio mexicano para supervisar plantas o empresas en el ámbito laboral. “Evidentemente eso no es aceptable, ni se aceptará. En eso hay consenso de todos”.

Asimismo, dijo que México ve con buenos ojos los paneles para resolver controversias entre ambos países. La resolución sería no sólo en lo laboral, sino en otros temas. Sobre los compromisos en materia de medio ambiente, comentó que nuestro país tiene una posición más avanzada que la Unión Americana, para empezar, en cambio climático. “Por lo tanto, no tenemos ningún inconveniente en que los compromisos de carácter internacional de México en materia de medio ambiente puedan incluirse en el Tratado porque también obligarían a Estados Unidos”, agregó.

En el caso de los biomedicamentos y los tiempos para su protección, precisó que México ha planteado varias alternativas, “veremos cuál se adopta para que sea más ágil y los tiempos de protección no sean tan extendidos”.

Respecto al acero y al aluminio, dijo que se quería proponer por Estados Unidos la obligación de que el 70 por ciento del acero sea de la región de Norteamérica, lo mismo en el caso del aluminio y que pudiera ser desde lo que se llama la fundición originaria del acero. México ya les compartió que eso nos crearía muchos problemas, aseguró.

Después de esta reunión, se les dirá que no aceptaríamos de ninguna manera que esa obligación entre en vigor en el momento en que el Tratado sea ratificado, sino que tendrá que ser con un plazo de más de cinco años. En el aluminio no aceptaremos ningún plazo, dado que México no tiene el recurso primordial del aluminio, que nos pondría en una desventaja muy grande, advirtió el funcionario, subrayó.

En el mensaje estuvieron el senador Héctor Vasconcelos, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores; Gina Andrea Cruz Blackledge, presidenta de la Comsión de Relaciones Exteriores América del Norte, así como Graciela Márquez, secretaria de Economía, y Jesús Seade, jefe del equipo negociador mexicano.