Gracias presidente, quiero felicitar la congruencia ideológica que hoy Acción Nacional manifiesta y es que nos habían acostumbrado a otra cosa, porque un día se despertaban medioambientalistas, al otro día defensores de derechos humanos, feministas, pero bueno, hoy no, hoy sí son lo que dicen ser, hoy sí son congruentes con su historia.
Hagamos memoria, ¿sabrán ustedes por qué se fundó el PAN? Precisamente para oponerse a la expropiación petrolera de Lázaro Cárdenas. Demos un brinquito en el tiempo, ¿se acuerdan de quién era el secretario de Energía en el sexenio de Vicente Fox cuando subió el precio a la electricidad en un 90%? Felipe Calderón. ¿Se acuerdan a dónde se fue a trabajar Felipe Calderón? Inmediatamente cuando dejó la presidencia de la República al Consejo de Administración de Avangrid, empresa filial de Iberdrola de la cual cobró 10 millones de pesos. Pero claro, en estos días seguramente se le irá la luz, se le irá el Internet y no se va a posicionar sobre los 38 años a los que acaban de sentenciar a prisión a su mano derecha, a Genaro García Luna.
¿Se acuerdan con los votos de qué partido se aprobó la reforma energética de Peña Nieto y además en qué condiciones? Porque con ustedes no todo es ideológico, en muchas ocasiones, en la mayoría diría yo, es metálico.
Precisamente por eso el pueblo ya no se toma con seriedad sus opiniones en materia eléctrica porque cuando hicieron la reforma energética, con moches y sobornos de por medio, prometieron que la luz bajaría de precio y subió en un 30%.
Con Pemex y con CFE ustedes hicieron un rompecabezas, separaron en muchas piezas los distintos procesos de su actividad buscando entregar al mercado las etapas más rentables y condenando al Estado mexicano, es decir, al pueblo de México a asumir el costo de los procesos deficitarios que permitían a los privados multiplicar sus ganancias.
Es enfermizo, es injusto, es francamente repugnante. Si las y los mexicanos somos titulares de la enorme riqueza energética de nuestra patria, ¿por qué las familias mexicanas deben pagar 10 veces más cara la luz que Oxxo subvencionando con su recibo las ganancias de grandes empresas transnacionales a través de mecanismos como el de las sociedades de autoabasto?
¿Cómo le voy a explicar a una señora o a un señor que tiene una tiendita de barrio, que en una esquina que apenas tiene un ventilador, un refrigerador que tiene que pagar 10 veces más cara la luz que un Oxxo?, que tiene los anaqueles completamente iluminados, un montón de refrigeradores y su escaparate publicitándose, iluminado las 24 horas del día. Ustedes no entienden ni valoran la riqueza eléctrica real que tienen nuestras empresas.
Por ponerles un ejemplo, la CFE dispone de 900 mil kilómetros de redes de distribución que podrían dar la vuelta al mundo casi 80 veces. ¿Por qué creen que las grandes transnacionales querían quedarse con el sistema eléctrico mexicano? Porque estamos hablando de casi 90 años de inversión pública con un valor incalculable que según estimaciones rondaría los miles de billones de pesos. ¿Por qué habríamos de malvender eso? Si es de nuestros padres, de nuestras abuelas, de nuestros hijos, de nuestras nietas.
Probablemente a Iberdrola no le sale rentable que en Urique, Chínipas, Guazapares, todos los municipios de la Sierra Tarahumara, las comunidades se quiten el frío en los duros inviernos de mi estado, el estado de Chihuahua. Sin embargo, es evidente para todas y todos que a grados bajo cero se necesita algún tipo de energético para sobrellevar dignamente la coyuntura climática. En ese caso, la empresa pública, aunque no le convengan términos económicos, tiene el deber de asumir los costos para garantizar un derecho. En cambio, en una de las torres residenciales de alto poder adquisitivo en Chihuahua capital, debe ser muy rentable ofrecer el servicio eléctrico en los días más extremos de frío y de calor.
Si ese servicio lo otorga Iberdrola, las ganancias se van a España. Pero si ese servicio lo otorga una empresa pública, se utilizan esas ganancias para poder costear el servicio en las comunidades de la Sierra Tarahumara a las que Iberdrola nunca va a llegar.
Quisiera cerrar en esta lógica de hacer memoria. Recordemos uno de los discursos que dio el presidente Adolfo López Mateos cuando nacionalizó la industria eléctrica y nos advirtió: “les devuelvo la energía eléctrica que es de exclusiva propiedad de la nación, pero no se confíen porque en algunos años futuros, algunos malos mexicanos identificados con las peores causas intentarán revertir esto”. Parece que veía el futuro.
Quien vote en contra de esta iniciativa estará votando en contra de la soberanía energética, de la seguridad nacional y de que a México le vaya mejor.
Que la historia los vuelva a juzgar. Muchas gracias.