Ciudad de México, a 29 de marzo de 2019

• 30 de marzo, Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, fecha clave para reflexionar sobre las avances y retos para acabar con la discriminación histórica.
• El Senado de la República y el Gobierno de México están comprometidos en materializar todos los derechos de las trabajadoras del hogar en el país.
• El Presidente de México confirmó que próximamente ratificará el Convenio 189 de la OIT.

Garantizar todos los derechos para todas las trabajadoras del hogar, ha sido uno de los objetivos trazados por la cuarta transformación, es así como el Gobierno de México y el Senado de la República han puesto en marcha diversas acciones a favor de este grupo social históricamente discriminado.

El 30 de marzo es considerado el Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, razón por la cual vale la pena reflexionar sobre los avances y retos que enfrentan las mujeres dedicadas al trabajo doméstico en lo relativo a sus derechos laborales, acceso a la salud, igualdad y no discriminación, entre otras agendas pendientes.

En el Senado de la República propusimos reformar diversos artículos de la Ley Federal del Trabajo de manera que se garanticen los derechos y prestaciones sociales a quienes se dedican al trabajo doméstico. Esta iniciativa ya fue aprobada en la Comisión de Trabajo y Previsión Social, ahora se analiza en la Comisión de Estudios Legislativos, Primera.

Entre los objetivos principales de la propuesta se encuentran:

• Definir a la persona trabajadora del hogar como toda persona que, de manera remunerada, realice actividades de aseo y cuidado, asistencia y demás, en el marco de una relación laboral y no lucrativa.
• Prohibir la contratación de personas menores de 15 años y que cuando se contrate a adolescentes mayores de 15 años, sus jornadas no excedan de seis horas diarias y 36 horas semanales.
• Contratación por escrito que incluya, como mínimo, dirección del lugar de trabajo habitual, fecha de inicio, duración y término, tipo de trabajo a realizar, remuneración y periodicidad de los pagos, horas de trabajo, pago de vacaciones, períodos de descanso diario y semanal según sea el caso.
• Suministro de alimentos y de alojamiento cuando proceda, como una prestación y no como parte del salario.
• Las jornadas de trabajo no podrán exceder las ocho horas diarias y, cuando excedan, deberán de considerase como horas extra, en el caso de personas trabajadoras que residan en el domicilio donde laboran.
• Las personas trabajadoras del hogar deberán contar con las prestaciones preestablecidas en la ley, como vacaciones, prima vacacional, pago de día de descanso, acceso a seguridad social y aguinaldo.

De acuerdo a la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, para el primer trimestre de 2018 en México 2.3 millones de personas se dedicaban al trabajo del hogar remunerado. En total, 92% son mujeres (INEGI 2018). Además, de acuerdo a datos del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED), el 96% de las trabajadoras del hogar no cuentan con un contrato laboral escrito que especifique sus derechos y obligaciones.

En tanto, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) aprobó poner en marcha el Plan Piloto de Incorporación a Personas Trabajadoras del Hogar, a fin de garantizarles el acceso a servicios médicos, hospitalarios, farmacéuticos, obstétricos, incapacidades, pensión por invalidez y vida, fondo para el retiro, así como prestaciones sociales, principalmente servicio de guardería y velatorios.

Esta decisión forma parte de las estrategias de la 4ª Transformación para materializar los derechos de las trabajadoras del hogar, a la par que con ello se acata la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para garantizarles seguridad social.

Es importante subrayar que el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció recientemente que su gobierno ratificará el Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), relativo a los derechos laborales de las trabajadoras del hogar. “Lo vamos a hacer, se va a ratificar el convenio y cumplir con este acuerdo”, afirmó el mandatario.

Sin duda, es urgente acabar con los estigmas, la discriminación y la violencia que enfrentan las trabajadoras del hogar, primero por el simple hecho de ser mujeres, después porque en muchos casos son de origen indígena y finalmente, por la vulnerabilidad que representa la ausencia de un marco legal que obligue a la fuente empleadora a brindarles derechos laborales plenos.

Desde la Comisión para la Igualdad de Género y desde el grupo parlamentario de Morena en el Senado de la República, seguiremos acompañando todos los esfuerzos encaminados a abatir la brecha de desigualdad e injusticias que han vivido históricamente las mujeres trabajadoras del hogar.