- Políticas públicas para impulsar vivienda ordenada y combate al cambio climático, principales temas.
Martha Guerrero Sánchez, senadora del Grupo Parlamentario de Morena, destacó la importancia de escuchar la opinión de expertos y organizaciones de la sociedad civil para la construcción de políticas públicas viables que permitan el diseño y planeación de ciudades sustentables. En caso contrario, advirtió, los objetivos de la Agenda 2030 no se podrán cubrir en el plazo establecido.
Al inaugurar la conferencia “El tejido social en la construcción de Ciudad: Una discusión de ética urbana y desigualdad”, la legisladora reconoció que existe disposición de los órdenes de gobierno, de las entidades federativas y de los organismos civiles para trabajar de manera coordinada, para que las zonas metropolitanas de nuestro país sean habitables, ordenadas y que generen el desarrollo de sus pobladores.
En el Estado de México somos más de 17 millones de habitantes y en la Ciudad de México, ocho millones. Todos los días se traslada gran número de personas de una entidad a otra. Lamentablemente, estas entidades son la que registran un mayor número de incidencias delictivas y las que tienen más desordenamiento territorial. Tenemos mucho que hacer, indicó.
Por su parte, Corin Robertson, embajadora británica en México, alertó sobre los efectos del cambio climático y consideró que quienes más sufren este fenómeno son los pobres. Es indispensable, dijo, que a través de la cooperación y de la colaboración los países del mundo se realicen acciones para atacar este problema global.
Se estima que dos tercios de la población humana vivirá en ciudades en 2050, lo que representa un reto enorme: proveer sosteniblemente a cerca de seis mil millones de personas con condiciones de vida dignas. Esto, aseguró, requiere reconfigurar cómo pensamos, planeamos y vivimos en las ciudades.
Corin Robertson resaltó que México es un país que ha buscado ser más activamente sostenible, desde lo legal, y lo reconoció por ser una de las primeras naciones que aprobó una Ley de Cambio Climático que establece que las ciudades provean acciones que contribuyan a mitigar el cambio climático.
Por su parte, la directora ejecutiva del Word Resources Institute, México, Adriana Lobo aceptó que en el nuevo gobierno existe el interés por abrir espacios a las organizaciones de la sociedad civil para contribuir al diseño, implementación y evaluación de propuestas de políticas públicas, mediante la elaboración de una agenda que se traduzca en acciones que consoliden ciudades más habitables y sostenibles.
Uno de los objetivos de la organización que encabeza, explicó, es que a través de la investigación y análisis técnico se de solidez a las propuestas realizadas y se dote de evidencia robusta a los gobiernos nacionales sobre las mejores opciones de política disponibles.
En su conferencia magistral, Saskia Sassen, ganadora del Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales 2013, y considerada una de las mujeres más importantes en esta materia, destacó que una ciudad es un espacio donde hay desigualdad. Sin embargo, lo importante es reconocer hasta qué punto esa condición se vuelve negativa, porque allí es donde toma sentido el tema de la “ética de ciudad”. Es decir, para que a través de este concepto se acomoden los distintos niveles de ingresos y también asegurar que todo funcione correctamente.
En este contexto, la académica resaltó la necesidad de construir nuevas ciudades, dado que las existentes tienen problemas interminables. Una ciudad con un solo centro tiene periferias interminables, donde los que viajan a la ciudad lo hacen hasta por más de tres horas, reduciendo su rendimiento laboral.
Recalcó que la creación de “ciudades globales” representa uno de los problemas que no se han confrontado. Necesitamos construir más ciudades de tamaño medio. Es importante descentralizar puestos de trabajo, oficinas clave y negocios.
Por su parte, Román Meyer Falcón, secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, mencionó que uno de los retos en los que se tendrá que trabajar, en coordinación con los demás órdenes de gobierno, estados y municipios, es la recuperación de la rectoría del Estado sobre la política de suelo.
El funcionario criticó las políticas de desarrollo de vivienda en anteriores administraciones porque impulsó la construcción masiva de casas de interés social que ahora están abandonadas y representan un riesgo porque fomentan inseguridad.
Con la llegada del nuevo gobierno, sostuvo, tenemos la oportunidad de llevar a cabo una política de vivienda acorde a los trabajadores mexicanos. Ahora existen cinco millones de hogares de interés social en desuso, principalmente en el norte de la República.
El secretario mencionó que uno de los retos de la administración de Andrés Manuel López Obrador es cambiar el modelo de construcción de vivienda conforme a las características de cada zona y de los sectores de la sociedad, que contemplen también créditos a los ciudadanos sin Infonavit o Fondo de la Vivienda del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Fovissste), pero con capacidad de pago.
Meyer Falcón admitió que hace falta actualizar los planes de desarrollo urbano en los municipios. De hecho, reconoció que 2 mil 400 de ellos no los tienen y los que sí, dijo, datan de hace 20 años.
En su participación, Carlos Martínez Velázquez, director general del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), dio a conocer que, junto con la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, se llevará a cabo un programa de recuperación de vivienda abandonada.
Subrayó que las ciudades se moldean con la economía, como el caso de la frontera norte, con el tipo de industria, producción y empleos. Si este modelo cambia o se realiza igual para todas las zonas, las personas sufren.
Martínez Velázquez lamentó que los anteriores modelos fomentaron la corrupción ya que muchos ciudadanos necesitaban dar sobornos para tener una vivienda.