• La información debe ser adecuada, veraz y pluralista, sin sesgos sexuales o de violencia sexual, física, psicológica o intrafamiliar
• Señala que debe prevalecer el desarrollo integral de menores y adolescentes, y asegurar el ejercicio pleno de sus derechos
   

El senador Américo Villarreal Anaya, del Grupo Parlamentario de Morena, propuso al Gobierno de la Ciudad de México revisar su legislación sobre publicidad visual con el objetivo de que no se induzca a la violencia (visual o sexual de género) discriminación, racismo, toxicomanía, sexismo, intolerancia religiosa o política y toda aquella que atente contra los derechos de la sociedad y los valores de la familia. 

Villarreal Anaya indica que la legislación sobre publicidad visual debe contener de forma prioritaria, la promoción del desarrollo integral de las niñas, niños y adolescentes, y asegurar el ejercicio pleno de sus derechos atendiendo al principio de su interés superior y que sus derechos prevalezcan sobre todas las demás personas. 

Además, dicha normativa debe tomar en cuenta la violencia de género, a fin de incluir otras formas de violencia hacia las mujeres, principalmente la violencia sexual visual. 

Precisa que es deber del Estado, la sociedad y la familia, asegurar que la niñez y adolescencia reciban información publicitaria adecuada, veraz y pluralista, sin sesgos sexuales o de violencia sexual visual, física, psicológica o intrafamiliar y que se debe promover el bienestar social, espiritual y moral, la salud física y mental. 

El senador por Morena destaca en su propuesta con punto de acuerdo, que la dignidad de la mujer, los estereotipos sexistas, la discriminación a través del lenguaje o la imagen, son consecuencia de múltiples factores sociales y culturales, por lo que es necesario entender que las mujeres no son un objeto, y se debe luchar para acabar con la denigración femenina y enaltecerlas. 

El trato que se le da a las féminas, tanto en televisión como en publicidad urbana, es consecuencia de una cultura consolidada que menoscaba y denigra su imagen, advierte. 

Asimismo, expone que la violencia visual está arraigada en las actitudes individuales que toleran la violencia dentro de la familia, la comunidad y el Estado. No obstante, advierte, se trata de una violación directa de los derechos humanos, niega la dignidad humana del individuo y perjudica el desarrollo humano en los pequeños. 

Todo esto, puntualiza, implica cambios legislativos, educativos y en la normatividad de la publicidad, entre otros aspectos.

El Punto de Acuerdo fue turnado directamente a la Comisión de Zonas Metropolitanas y Movilidad, en la sesión del 19 de marzo de 2020.