- Concluyen cinco días de audiencias públicas sobre creación de Guardia Nacional.
- Falso, que en México no exista un cuerpo policiaco civil profesional: Manelich Castilla.
En el quinto y último día de las audiencias públicas para analizar la minuta que crea la Guardia Nacional, organizaciones ciudadanas y académicas pugnaron por fortalecer a los cuerpos policiacos de carácter civil y evitar que se constitucionalice la militarización del país.
El senador Miguel Ángel Mancera, del PRD, comentó que las audiencias públicas permitieron encontrar puntos de debate, reflexión y coincidencia “para la construcción de lo que todos queremos”: Una Guardia Nacional que cumpla con el marco constitucional, que sea convencional y apoye en la seguridad de México.
Para el senador de Morena, Cruz Pérez Cuéllar, este ejercicio de Parlamento Abierto llevará a un buen resultado ante el enorme problema de seguridad. Recalcó la importancia de abordar este tema con toda la apertura, privilegiar el mando civil y el respeto a los derechos humanos para enfrentar la grave criminalidad en el país.
Manelich Castilla Cravioto, ex comisionado general de la Policía Federal, aseveró que es falso que no exista en México un cuerpo policiaco civil profesional, que la Policía Federal sea indisciplinada e ineficiente, como se ha señalado. Pudo ser insuficiente, pero nunca ineficiente, acotó.
Refirió que esa institución policiaca alcanzó y mantuvo niveles aprobatorios cercanos al 70 por ciento, según distintas encuestas del Inegi. Además, fue reconocida por organizaciones como la gendarmería francesa, los carabineros de Italia y de Chile, entre otras.
Propuso enfocar esfuerzos y gasto para fortalecer capacidades y número de elementos de la policía civil. Esta medida, explicó, no riñe con construir un cuerpo de seguridad intermedia, que es lo que entraña la propuesta del Presidente de la República.
Subrayó que la Policía Federal no es un fantasma y pidió no olvidar que en la base de ejecución de todas las grandes decisiones se encuentran hombres y mujeres que conforman las instituciones, cuyos méritos no pueden ni deben soslayarse frente a un cambio de timón.
Reconocer que una estrategia debe cambiar, no debe desconocer ni mucho menos dinamitar, los resultados positivos generados por decenas de miles de mexicanos y mexicanas, que han dedicado su vida al fortalecimiento de la policía civil.
Manelich Castilla comentó que “lo único peor a emprender un proyecto sin diagnóstico, es emprenderlo a partir de un diagnóstico erróneo. Eso parece haber sucedido en la justificación inicial para dar nacimiento a la Guardia Nacional”.
Al explicar la función de los carabineros en Italia, Paolo Pagliai, fundador de la Universidad del Claustro de Sor Juana, subrayó que son un cuerpo fiel al Estado, no al gobierno, por lo que no son un riesgo para la democracia. Además, tienen una doble función: militar y civil.
Explicó que los carabineros tienen un reclutamiento y formación distinta a la del Ejército. Su arma es la formación ética y cuentan con un gran nivel de profesionalización para pelear contra la delincuencia organizada. No se les lanza a la guerra por urgencia, aclaró. Representan la presencia del Estado en el territorio y tienen un reconocimiento real de la opinión pública.
Profesionalizar los cuerpos de seguridad
Juan Diego Téllez Chávez, director Jurídico del municipio de Comonfort, Guanajuato, dijo que la iniciativa de Guardia Nacional mixta es el justo medio, donde participa la policía civil y los cuerpos militares, para lograr un equilibrio de funciones y fusión de las ventajas de cada uno de ellos, a fin de brindar seguridad al país.
Resaltó la necesidad de formación y profesionalización de los cuerpos de seguridad. Pugnó por la regulación de la fuerza pública para controlar una situación difícil. La capacitación, subrayó, debe ser el cimiento base de una excelente política en materia de seguridad pública.
Maite Azuela, activista e integrante del colectivo #SeguridadSinGuerra, propuso la creación de una guardia menos letal, formada y encabezada por civiles. “Necesitamos una guardia que no constitucionalice la militarización de la seguridad pública”.
Llamó a los senadores a construir una propuesta civil. Deben legislar, dijo, resistiéndose a las presiones y a las intimidaciones de quienes dicen que la vía militar es la única forma para reforzar la seguridad pública.
El vicepresidente de la Barra Queretana Colegio de Abogados A.C. Alfonso Rodríguez Sánchez, se opuso a la creación de una nueva Guardia Nacional. “No a la militarización del país, no a una policía militar. Si a una policía militarizada bajo un mando civil”.
Lo que se debe hacer, abundó, es replantear el proyecto y empezar a construir sobre lo que ya tenemos. Preservar la autonomía civil del mando policiaco e inyectar recursos a la creación de un instituto de seguridad social sólo para ellos”.
No a la fuerza pública en el centro de políticas públicas
Ernesto López Portillo Vargas, secretario técnico del Foro Mexicano para la Seguridad Democrática de la Universidad Iberoamericana, propuso construir una política que ponga el uso de la fuerza en un contexto de régimen constitucional. Que ésta sea un insumo de control democrático de la policía y de las Fuerzas Armadas. Se requiere, dijo, combinar las medidas, no colocar la fuerza en el centro de la política pública.
Señaló que aprobar la minuta en sus términos es continuar el círculo vicioso perfecto de la inseguridad. Ésta violencia extrema impide construir políticas multisectoriales de seguridad de corto, mediano y largo plazo. “No alcanza la fuerza del Estado: la militar y policial. No alcanza para construir seguridad sostenible”, subrayó.
David Ramírez de Grey, coordinador del Programa de Seguridad, en México Evalúa, consideró que la minuta profundizará el rezago de las fuerzas civiles en los tres niveles de gobierno al dar prioridad al mando militar. Además, la capacitación y profesionalización de la propuesta implica riesgos importantes.
Preguntó que si se concreta la creación de la Guardia Nacional como un cuerpo militar, pero con labores policiales, con funciones acotadas por tiempo determinado, ¿Cómo se preparará la integración del cuerpo civil que la sustituya cuando termine sus funciones?
Abundó: si ésta se constituye como una fuerza permanente de origen militar que ocupe las funciones de una policía de alcance nacional, ¿Qué modelo de desarrollo policial se estará privilegiando para dar cuenta de las complicidades de la incidencia criminal en un país con federalismo en constante tensión? La minuta no da respuestas al respecto, destacó.
La investigadora de Causa Común, Daira Arana Aguilar, señaló que sin una legislación clara en el uso de la fuerza no se podrá avanzar en la capacitación, equipamiento, doctrina policial, sistema de recompensas y sanciones, que permita generar las garantías necesarias para que los excesos o la inacción disminuyan.
La presencia del Estado, precisó, debe ir más allá de una demostración de fuerza, a través de una profunda y verdadera profesionalización de nuestros policías y el diseño de políticas públicas adecuadas.
