Grupo Parlamentario MORENA, LXVI Legislatura

Ricardo Monreal afirma que estrategia de seguridad es perfectible

  • Respalda plan del presidente López Obrador, pero considera que poderes de la Unión y órdenes de gobierno tienen que revisarlo a fondo  

Los hechos ocurridos en Jalisco y Guanajuato demuestran que atender de manera satisfactoria el problema de la inseguridad depende de robustecer la coordinación entre los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, así como entre los gobiernos federal, estatal y municipal, afirmó el coordinador parlamentario de Morena, Ricardo Monreal Ávila.  

El senador enfatizó que la seguridad pública es responsabilidad y trabajo de todos los ámbitos del Estado, por lo que refrendó su apoyo a la estrategia de seguridad del presidente Andrés Manuel López Obrador, pero consideró que los tres poderes de la Unión y órdenes de gobierno tienen que revisar a fondo y de manera inmediata el plan del Gobierno federal.  

La premisa de donde debe partir la discusión pública -acotó en un artículo que publicó en redes sociales-, es que toda política es perfectible, es decir, que se puede mejorar a partir de la revisión de sus objetivos y resultados.  

Por tanto, el Senado de la República, como órgano del Estado mexicano y facultado por ley para revisar la estrategia de seguridad, es sensible a lo que ocurre en distintas entidades federativas y regiones del país. 

Ricardo Monreal destacó que “no hay tarea más urgente ni más importante que atender el reclamo del pueblo por recuperar la tranquilidad en su vida familiar y personal, y gozar de un entorno de paz, con seguridad y confianza.  

En la Cámara de Senadores, subrayó el presidente de la Junta de Coordinación Política, “tenemos la disposición para contribuir a ello”. 

Recordó que el pasado 9 de agosto, en un operativo frontal contra grupos del crimen organizado, se vivió una jornada de violencia en diversas localidades de Jalisco y Guanajuato.  

A pesar de que no se registraron pérdidas humanas y que los daños se limitaron al plano material, dijo, “estos hechos ponen de manifiesto la necesidad de abordar el fenómeno de inseguridad y violencia desde una perspectiva integral que dé como resultado una política de Estado que pacifique a nuestra sociedad”. 

En la discusión pública se ha hablado de la naturaleza de este despliegue de violencia por parte de los grupos del crimen organizado, incluso hay quienes sostienen que se trata de actos de terrorismo.  

Pero estos análisis, agregó el senador, se deben hacer con suma seriedad, ya que podrían conducir a un mal diagnóstico de la realidad. En principio, hay que entender que el terrorismo se distingue de otras expresiones de violencia porque se trata de actos cuyas motivaciones son políticas.  

En el caso del crimen organizado en México, explicó, sus principales estímulos son de carácter económico, es decir, aun cuando gobiernos pasados declararon una guerra contra el narcotráfico, éste nunca se propuso derrocar a las autoridades legalmente constituidas para establecer un régimen afín a sus intereses.  

Por lo que “estamos ante un fenómeno protagonizado por grupos generadores de violencia, que emplean métodos de intimidación, que no necesariamente corresponden a actos de terrorismo”. 

Ricardo Monreal subrayó que también es necesario reconocer que el Estado cuenta con plenas capacidades de actuación, pues el operativo que se condujo fue resultado de tareas de inteligencia que permitieron ubicar una reunión de cabecillas del crimen organizado.  

Ante la respuesta desmedida de los grupos del narcotráfico, las fuerzas federales tuvieron la capacidad de evitar que se produjeran pérdidas de vidas humanas, y, en los días subsecuentes, detener a diversas personas involucradas en estos acontecimientos. 

Sin embargo, también se debe admitir que es necesario continuar con el robustecimiento de las fuerzas federales, estatales y municipales de seguridad. 

Ello, dijo, porque la filtración de información conllevó a la no detención del objetivo del operativo y a abrir una ventana de tiempo lo suficientemente amplia para que el crimen organizado pudiera poner en marcha un “contraoperativo” de las dimensiones conocidas. 

“Por esta razón, y en pleno refrendo de mi apoyo al presidente López Obrador, es preciso que los tres poderes de la Unión y los tres órdenes de gobierno abramos paso a una revisión inmediata y de fondo de la estrategia de seguridad implementada por el Gobierno federal”.