Muchas gracias presidenta.
Creo que; estoy segura más bien, que ahorita en México, en todo el país, hay un ambiente de gusto, de regocijo, por ver una mayoría en el Senado ponerse de acuerdo; por ver a sus senadores y senadoras estar en la misma sintonía de liberar el derecho de los ciudadanos y ciudadanas mexicanas si quieren o no quieren hacer uso de la Cannabis.
Yo no estoy de acuerdo con quienes dicen que va a haber una tiendita en cada esquina para que vayan los jóvenes, los niños, los adolescentes a consumir Cannabis.
En el estado donde yo nací, donde vivo y donde estoy comprometida, Durango Durango, pues está estigmatizado desde hace mucho tiempo en el famoso triángulo dorado, allá con el mismo estado del senador Madero y de los sinaloenses. Hemos sufrido mucho como estado, hemos batallado mucho por la siembra, producción, trasiego, violencia, pleitos, matanzas, huérfanos y viudas por culpa de la Cannabis o la marihuana, de la famosa cola de borrego que hay por allá, que dicen que es muy buena.
Y fíjense que los tepehuanos, los que viven en la Sierra, que la siembran y mucha, no la consumen, no son adictos, no andan detrás de los 400 churros que les van a dar permiso de traer. Eso es falso. El estar en frente de plantas mucho más bonitas y grandes que las que están aquí en la plaza Luis Pasteur no les motiva, no está en ellos, no está en su formación, no está en su creencia ni en su crecimiento de estar fumando mucho la marihuana. Sí la usan mucho con el alcohol y en embarradas para las reumas y les da muy buenos resultados. No es cierto, no es cierto que el que vayamos a regularizar el uso de la Cannabis, vayamos a tener más jóvenes, niños y adultos consumiendo. Eso es falso.
Estoy totalmente de acuerdo con quienes han argumentado a favor de este dictamen. De los que están en contra qué puedo decir, que sus argumentos están basados en el miedo, en el temor, en el prejuicio, consecuentemente en la ignorancia. La ignorancia es la madre de todos los prejuicios, así de simple. Que si es sustancia endiablada, que si es una sustancia que te va a causar una serie de actitudes y conductas, no es cierto. También eso va a favorecer el que liberemos la regulación de la Cannabis, que aquí en México se estudie seriamente las consecuencias, los beneficios y los perjuicios de esa sustancia.
Rápidamente, antes de que el tiempo se consuma, quiero decirles que no somos nosotros los autoritarios, que nosotros somos los que no queremos que los demás piensen, vivan como nosotros decimos. Somos legisladores y tenemos que respetar el derecho, no el gusto, el derecho de los y las ciudadanas de tomar las sustancias que les agrade y tenemos que cuidarlos y protegerlos. Pero no nada más eso. Vamos por la salud, vamos por la industria.
Insisto en mi estado, vamos por abatir la violencia, sobre todo en contra de las mujeres.
Termino. Hemos cumplido ciudadanos y ciudadanas, hemos cumplido un compromiso de campaña. Muchos de los que estamos aquí hemos cumplido con las asociaciones de padres y madres preocupados por sus niños y sus niñas. Hemos cumplido con los investigadores, hemos cumplido con los académicos, hemos cumplido con nuestros pueblos originarios que tanto nos pidieron y nos exigieron que abatiéramos la violencia, la inseguridad, la sangre y la orfandad de nuestra tierra.
Durango, hemos cumplido.
Es todo, presidenta.