- Existen cerca de nueve millones de hogares con rezago habitacional, señala Enríquez Herrera
El senador José Ramón Enríquez Herrera, de Morena, hizo un llamado a la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), para incrementar los mecanismos de recuperación de viviendas abandonadas e implementar proyectos integrales de desarrollo que beneficien a las mexicanas y los mexicanos, que hoy día no cuentan con una vivienda digna.
El objeto de este punto de acuerdo, explicó el legislador, es que la población tenga condiciones favorables para su desarrollo humano, social y económico, ya que la falta de un hogar representa uno de los principales obstáculos para obtenerlos.
Señaló que en el país existen cerca de nueve millones de hogares en rezago habitacional y la proyección al 2030, conforme a datos del Consejo Coordinador Empresarial, es que se requerirán 25.8 millones de viviendas como solución a este problema.
El legislador refirió que de acuerdo a la Sedatu, el gran reto, en el corto y mediano plazos, es abatir dicho rezago, donde tres cuartas partes del total requieren ampliación y mejoramiento.
Al respecto, indicó que el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Conejal) y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) detectaron un universo de cinco millones de viviendas abandonadas.
Los estados con mayor índice de desocupación son: Chihuahua con 28 por ciento; Tamaulipas con 15 por ciento; Baja California con 12 por ciento; Sonora nueve por ciento y Sinaloa, que registra seis por ciento del parque habitacional.
Enríquez Herrera destacó que es necesaria la coordinación de esfuerzos para afianzar programas de recuperación de viviendas abandonadas, a efecto de beneficiar a la población que se encuentra ante una clara desventaja y requiera, de forma urgente, una opción para hacerse de este elemento básico e indispensable para el desarrollo social.
Una vivienda digna, aseguró el senador, crea patrimonio familiar, tejido social, mejora la calidad de vida al aportar condiciones idóneas para la educación, la salud, la seguridad pública y la paz social.
Recordó que la Política Nacional de Vivienda del Gobierno Federal busca reducir el rezago habitacional a 2.2 millones, con una inyección de 2.3 billones de pesos, pero es indispensable realizar una coordinación de esfuerzos que permita focalizar el problema, expresó.
La necesidad de vivienda futura depende directamente del crecimiento poblacional y de la formación de los nuevos hogares, lo que representa un reto para las autoridades dar continuidad e implementar políticas que sigan atendiendo este rezago, concluyó.