• Indispensable, adecuarlas a modelos de producción y distribución eficientes, plantea el senador Enríquez Herrera

El senador de Morena, José Ramón Enríquez Herrera, propuso modificar la Ley de Desarrollo Rural Sustentable, a efecto de crear estrategias que apoyen el fortalecimiento de pequeñas empresas rurales, mejoren sus estructuras organizativas de producción y fomenten su regularización legal y consolidación.

Indicó que su propuesta considera ejes fundamentales, como el mejoramiento en su organización y en la toma de decisiones, lo que les permitirá adecuarse a modelos de producción y distribución eficientes, así como el desarrollo de unidades de producción sostenibles a corto, mediano y largo plazo.

Además, agregó, les ayudará a incrementar su productividad y competitividad en los nichos de mercados locales, regionales, estatales, nacionales e incluso internacionales.

El legislador refirió que una característica que distingue la estructura agraria y productiva de México es la pequeña y mediana propiedad. Indicó que nueve de cada diez productores en el sector agropecuario, forestal o pesquero pertenecen a esos grupos

Los pequeños y medianos productores, explicó, también se conocen como unidades productivas y se ubican al principio de la cadena productiva agrícola, además se caracterizan por poco o un casi nulo uso de tecnología, alta implementación de semillas criollas con alto uso de agroquímicos.

Mencionó que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía ha señalado que las unidades de producción que cuentan con una superficie menor a cinco hectáreas generan el 56.8 por ciento de los empleos del sector, tanto familiares como contratados.

Si consideramos a las unidades de producción que cuentan hasta diez hectáreas, el dato llega a 74.1 por ciento. Es decir, tres de cada cuatro empleos se localizan en la pequeña y mediana agricultura, mientras que las mayores o iguales a cien hectáreas sólo contratan al 7.9 por ciento de los trabajadores agrícolas.

Por ello, consideró indispensable una innovación en las estructuras organizacionales que conlleven a prácticas agrícolas que realmente beneficien a los pequeños productores y a su fortalecimiento.

La iniciativa fue enviada a las comisiones de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural, y de Estudios Legislativos Segunda.