• Señaló a la derecha de perversidad criminal por aspirar a que al presidente de México le vaya mal ante el Covid 19
• Advirtió que es difícil no percibir ánimos golpistas en los ataques multiplicados contra López Obrador

 En un artículo publicado por el senador Rubén Rocha Moya, del Grupo Parlamentario Morena, señaló que la derecha mexicana no asimila su estrepitosa derrota del 2018, por lo que su comportamiento político en plena emergencia sanitaria es una evidencia más de su desgaste ético y moral.

Rocha Moya acusó de perversidad criminal a la derecha en el país porque es ilegítimo y antihumanista su aspiración a que el presidente mexicano le vaya mal, así sea con mayores decesos por el Covid 19.

Subrayó que “lejos de aplaudir el anómalo posicionamiento de la derecha ante la crisis que agobia a las y los mexicanos, debemos hacer votos porque retome el camino que le trazaron sus ideólogos más conspicuos: Manuel Gómez Morín, Carlos Castillo Peraza, Manuel J. Clouthier, entre otros”.

Expuso que es difícil no percibir ánimos golpistas en los ataques multiplicados con intensidad al presidente Andrés Manuel López Obrador, como en los actos que amenazan con romper el pacto federalista apoyándose en unos pocos gobernadores de oposición, quienes esconden intereses de ciertos empresarios y aluden supuestas políticas fiscales discriminatorias.

El senador por el estado de Sinaloa sostuvo que “es fácil oler el tufo fascista de la derecha cuando en su desesperación ingenia diagnósticos apocalípticos, presume opiniones expertas respecto a la emergencia, tacha al presidente como culpable desde sus delirantes cuestionamientos y, sin más, implora su caída”.

“Reiteradamente traslucen su actitud facha, antidemocrática y desmesurada que, hasta el propio líder del CCE (Consejo Coordinador Empresarial) ha salido a llamarlos a la cordura y a que al menos esperen al referéndum de revocación de mandato, mecanismo democrático aprobado por el Poder Legislativo a propuesta del presidente López Obrador”, continuó.

En este sentido, llamó antidemocrática y corrupta a la derecha mexicana, la que además se porta “histérica, amarillista y goebbeliana al repetir mentiras o noticias falsas sin rubor y sin tregua, toda vez que su historia democrático partidista representada por el PAN terminó con su ascenso al poder nacional con Fox como presidente.”

Como muestra de esa debacle, citó el intento de exclusión orquestado por Vicente Fox en 2006 en contra de López Obrador en la contienda presidencial, misma que terminó en un fraude electoral que llevó a la imposición del panista Felipe Calderón como presidente, de quien dijo, enlutó a la nación con su guerra contra el narcotráfico dirigida por Genaro García Luna, quien estaba al servicio de las mismas bandas del narcotráfico.