A propósito de la pandemia en el mundo, varios parlamentos y asambleas legislativas han liberado o preliberado a las personas que están cumpliendo sentencias o condenas por delitos distintos.
En México, en el Senado de la República, como Cámara revisora, está pendiente la aprobación de la Ley General de Amnistía, que está en razón de la emergencia sanitaria, ha sido comentada por el Presidente de la República, el licenciado López Obrador, y en días pasados me lo comentó personalmente la Secretaria de Gobernación.
¿Por qué lo están planteando?
Porque tienen preocupación de que, dentro de los centros de rehabilitación social, pueda haber casos aislados, pero que estos provoquen contagios masivos o comunitarios al interior de estos centros de rehabilitación.
Por eso el Presidente de la República y la Secretaria de Gobernación, desde días pasados ha urgido al Senado a reunirse para concluir el proceso legislativo y poder liberar a algunas personas y evitar el hacinamiento carcelario.
Nosotros podemos, y estamos buscando los mecanismos para hacerlo; es un fin mayor y es una justificación plena frente a la pandemia y la emergencia sanitaria.
Voy a plantearle a varios compañeros de los grupos parlamentarios, senadoras y senadores, para buscar un mecanismo que, cuidando la distancia y cuidando las recomendaciones de no reuniones de mayor número de 50, podamos lograr este propósito.
Estoy empezando a conversar con los coordinadores de grupos parlamentarios, pero también el Presidente puede acudir a dos vías de manera muy rápida, extraordinarias: el indulto y la preliberación, que es un beneficio que la ley concede para que puedan tomar libertad o salir anticipadamente quienes están condenados.
Todo esto hay que experimentarlo, vale la pena.
El Senado de la República intentará hacer un acuerdo amplio para lograr la aprobación de ésta y otras leyes que sean fundamentales.