Grupo Parlamentario MORENA, LXVI Legislatura

Versión estenográfica del senador Héctor Vasconcelos, a nombre del Grupo Parlamentario Morena, en la comparecencia del licenciado Marcelo Ebrard Casaubón, secretario de Relaciones Exteriores, en el marco del análisis del I Informe de Gobierno del presidente de la República, en materia de politica exterior

Senadora presidenta.

Honorable asamblea.

Señor secretario de Relaciones Exteriores:

En la bancada de MORENA analizamos con detenimiento el capítulo de política exterior del Primer Informe de Gobierno del presidente de la República y hemos escuchado con atención su exposición sobre las más relevantes acciones de la administración en los meses transcurridos desde el término del período que cubre el referido informe.

Diversos temas hay que destacar en el quehacer de México en el mundo durante el primer año del actual Gobierno. Entre los más importantes sobresalen, en el largo plazo, en primer término el nuevo tratado México-Estados Unidos-Canadá; en segundo término, el programa de Desarrollo Integral para América Central; y el tercero, el renovado énfasis en la atención a nuestros compatriotas en los Estados Unidos de América.

Por lo que se refiere al T-MEC es de observarse que a lo largo de más de 25 años de vigencia del Tratado en vigor, se ha generado en amplios segmentos de la sociedad sobre la conveniencia de mantener, en principio, un tratado que en balance se traduce en ventajas significativas para múltiples sectores de los tres países. Por esa convicción México se convirtió en el primer país que ratificó el T-MEC, en esta Soberanía. No omito señalar que dicha ratificación se obtuvo con el voto unánime de todas las fuerzas políticas representadas en esta Soberanía.

En Morena estamos conscientes de que a fin de lograr que el Tratado sea aprobado por la Cámara de Representantes de Estados Unidos, ha sido necesaria la negociación de un adendum que enmienda y adiciona el texto firmado.

Dicho acuerdo adicional tendrá que ser ratificado en su oportunidad por este Senado. Deseamos que, sin perjuicio de la indispensable discreción a cerca de lo que se está negociando, este cuerpo legislativo disponga de información suficiente para hacer posible que el adendum también sea ratificado por unanimidad.

Entre los mayores logros de nuestra política exterior en estos meses, debemos señalar el diseño y puesta en marcha del Programa de Desarrollo Integral para Centroamérica que en caso de ser bien implementado, habrá de ser el germen del desarrollo económico y social de los países involucrados, y, por tanto, la solución de fondo a las causas que originan las migraciones hacia el norte. Exhortamos nuevamente al gobierno de  Estados Unidos a que materialice su contribución a un programa que representa la mejor fórmula para resolver el problema de su frontera con América Latina.

Resulta encomiable que una de las prioridades de nuestra política exterior sea el mejoramiento de la calidad de los servicios que brinda nuestra red consular en los Estados Unidos, pero desde nuestro punto de vista, para ello se requerirá de la asignación de mayores recursos a nuestros consulados. Lo anterior se justifica porque México se extiende hasta donde se encuentra el último mexicano.

Durante el periodo en comento, México tuvo que enfrentar la grave crisis ocasionada por la amenaza del gobierno norteamericano de imponer aranceles crecientes a nuestras exportaciones.  El Gobierno logró evitar una crisis económica que pudo haber afectado el desempeño del sexenio entero. Son conocidas las presiones que ejerció la Casa Blanca y las propuestas que México formuló para mitigar sus posibles consecuencias. Sostengo que, echando mano de pragmatismo, aunado a una clara concepción de los intereses de largo plazo de México, el Gobierno acotó el problema, ganó tiempo y logró ordenar y estabilizar los flujos migratorios provenientes de Centroamérica de acuerdo con la legislación mexicana y el Pacto Mundial del Marrakech. Haberlo conseguido no constituye un logro menor.

En los últimos días el anuncio del presidente de los Estados Unidos de que se propone calificar como terroristas a organizaciones criminales mexicanas, conforme a la legislación norteamericana, crea el peligro de una nueva crisis bilateral. Es claro que tal calificación, por los efectos extraterritoriales que acarrearía, amenaza la soberanía nacional. Por eso, nos congratulamos de las gestiones emprendidas por el Gobierno de la República para disiparla por la vía del diálogo. Celebramos particularmente su esfuerzo para encausar la relación bilateral, entre otros aspectos, al tema prioritario del tráfico de armas. La próxima reunión de usted, señor secretario, con el Procurador General estadounidense representa un paso relevante en el camino del diálogo.

Destaco, sobre el particular, el pronunciamiento que por unanimidad adoptó este Senado de la República a fin de rechazar esta pretensión del presidente de los Estados Unidos. Entre los mexicanos en la defensa de la soberanía no cabe la división.

No podríamos omitir el espinoso tema de Venezuela. Baste decir, por el momento, que el transcurrir de los meses ha demostrado que los esfuerzos por resolver la crisis desde afuera con medidas intervencionistas no han tenido éxito, y México se mantiene hoy como una opción de mediación para las partes en conflicto.

En Morena respaldamos enérgicamente la decisión del gobierno mexicano de otorgar asilo político a Evo Morales quien ante la amenaza militar se vio obligado a renunciar a la presidencia de su país. Tal decisión honra nuestra tradición de brindar refugio a todas las personas que por sus posturas ideológicas y políticas ven a amenazadas su vida y su integridad personal.

Señalar los logros mencionados no obsta para aludir a temas que aun preocupan a la opinión pública. Es innegable que diversos sectores hubieran deseado ver nuestro presidente encabezando las delegaciones de México en los foros internacionales, especialmente en la reunión del G20 y la Asamblea General de la ONU.  Hubiéramos preferido que nuestro presidente aprovechara esas ocasiones para transmitir al mundo las premisas y los objetivos de la Cuarta Transformación.

Asimismo, muchos echamos a menos un todavía mayor compromiso con las políticas encaminadas a combatir el calentamiento global. Este fenómeno cuyo punto de no retorno, quizá nos ha alcanzado ya, constituye desde mi punto de vista la mayor amenaza que la humanidad ha enfrentado en milenios. Ojalá que la perspectiva ecológica se convierta en una prioridad gubernamental durante el próximo año.

El grupo parlamentario de MORENA, senadores y senadoras, señor canciller, el Grupo Parlamentario de Morena reconoce una política exterior que fincada en nuestros principios constitucionales atiende los intereses nacionales y rendirá plenamente sus frutos a lo largo de esta administración.

Es cuanto presidenta.