Grupo Parlamentario MORENA, LXV Legislatura

Versión estenográfica de la mesa de trabajo con el licenciado Marcelo Ebrard Casaubón, secretario de Relaciones Exteriores, en el Primer Día de Trabajos de la Reunión Plenaria del Grupo Parlamentario de Morena en el Senado de la República

SENADOR RICARDO MONREAL: Ciudadano Marcelo Ebrard, sea bienvenido a esta Antigua Sede del Senado de la República, la Casa del Federalismo Mexicano.

Quisiera aprovechar esta oportunidad para hacerle un reconocimiento a la labor institucional, que ha realizado en la conducción de una nueva época de la política exterior mexicana.

Reconocemos que no ha sido sencillo, pero el Ejecutivo Federal encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, ha sabido librar tempestades internacionales, manteniéndose firme en nuestra exigencia para que se respete la soberanía nacional.

Desde el 2018, la relación entre México y el mundo cambió. Volvimos a mirar al sur para exportar el mejor de nuestros productos: el humanismo y la política social, como herramientas que ayuden a entender y atender el fondo de fenómenos y retos compartidos, como la migración, la seguridad y el tráfico ilícito de personas.

En el Senado de la República celebramos el esfuerzo realizado por el Gobierno de México para establecer el entendimiento bicentenario, a fin de enfrentar con un nuevo enfoque, más humano y social, el tema de la seguridad.

Hace unos días, recibimos en la Cámara de Senadores a legisladores estadounidenses de diversos estados, quienes nos expresaron los temas de mayor interés y preocupación para su gobierno: comercio, migración, seguridad y política energética.

Sabemos que en cada uno de estos temas el Gobierno Federal ha logrado avances significativos.

Éste es un momento clave para fortalecer la posición estratégica de nuestro país como parte del T-MEC. México es ya el segundo socio comercial más importante de los Estados Unidos; pero creemos que la actual coyuntura nos permitirá ir más allá para consolidar nuestra posición.

La corta distancia geográfica entre ambos países es idónea para reubicar la producción y fortalecer la cadena de suministros.

La nueva política exterior de México abre un panorama para tener un comercio con mayor justicia y equidad entre las naciones.

Por estas razones, el grupo parlamentario mayoritario en el Senado de la República, estará atento al desarrollo y a los resultados del diálogo económico de alto nivel que se llevará a cabo en la Ciudad de México el próximo 12 de septiembre, entre los gobiernos de nuestro país y el de Estados Unidos.

Sabemos que en esa reunión se revisará el avance de las prioridades que ambos países han fijado en materia comercial, como la ampliación de la producción en nuestro país de equipo médico, vacunas, semiconductores y microprocesadores.

Otro de los temas que se discutirán será la producción de baterías para los automóviles eléctricos, rumbo a la transición energética.

En el Senado de la República se aprobó las reformas a la Ley Minera, para que el litio fuera considerado patrimonio de la nación, y recientemente se publicó el decreto a través del cual se crea la empresa LitioMX.

Por eso creemos que ésta es una oportunidad única para que nuestro país se inserte en el proceso de producción rumbo a un futuro de energía limpias, que permita un desarrollo económico sustentable y el fortalecimiento del intercambio comercial.

Además, en estos momentos continúan los trabajos del panel que solicitó nuestro país y Canadá, para resolver las diferencias con Estados Unidos en torno a la interpretación y aplicación de las reglas de origen, para el sector automotriz bajo el T-MEC.

El Senado de la República respalda, la mayoría, la posición del Gobierno Federal, esto es que, conforme al texto del Tratado, la interpretación y aplicación debe permitir a los productores de vehículos de la región, beneficiarse de los nuevos requisitos en materia de reglas de origen que prevé el acuerdo.

Respecto al tema migratorio, el grupo mayoritario apoya la declaración conjunta que ambos países realizaron en la materia para impulsar una migración ordenada, segura y regular, así como para atender las causas de raíz.

En este sentido, nos mantenemos pendientes de los avances que se logren en la materia, especialmente de los compromisos adquiridos por parte del gobierno estadounidense respecto a la regularización de 11 millones de personas migrantes indocumentadas, a fortalecer el combate de tráfico de seres humano y a revertir el Título 42 e invertir 4 mil millones de dólares para atender las causas de la migración.

Respecto al tema energético, esta mayoría parlamentaria dará seguimiento puntual a la solicitud que el gobierno de Estados Unidos solicitó a México para iniciar consultas al amparo del T-MEC, a fin de plantear una serie de preocupaciones sobre la política energética de nuestra nación. Consideramos que el presidente López Obrador tiene razón en la defensa de la soberanía energética y ahí estaremos, a su lado.

Estados Unidos considera que existe un trato preferencial a las empresas estatales en el sector energético, lo que se traduce -dicen ellos- en un trato discriminatorio para el capital privado.

Los equipos técnicos tienen hasta el mes de octubre próximo para llegar a una conclusión, de lo contrario, el gobierno estadounidense o canadiense podrán solicitar el establecimiento del panel, lo que podría demorar la resolución hasta 2023.

En referencia al tema de seguridad, hemos expresado frente a ellos nuestra inconformidad con las acciones tomadas por el Departamento de Estado de la Unión Americana, instancia que hace unos días actualizó su lista de alerta de viajes a México, en rojo. No estamos de acuerdo con que así describan a Colima, Guerrero, Michoacán, Sinaloa, Tamaulipas y Zacatecas, por el alto índice de delincuencia y posibilidad de secuestro.

No estamos de acuerdo con estos pronunciamientos unilaterales, que afectan el desarrollo de nuestros pueblos.

Todos estos temas son complejos, delicados y primordiales para nuestro país. El Senado de la República es el responsable de la política internacional, de la revisión de la política internacional.

Queremos expresarle, canciller, que le exprese a su vez al presidente de la República, que caminaremos a su lado en el tema de la defensa de la soberanía y en el tema de la política internacional que ha diseñado.

Y usted de nueva cuenta, reciba nuestro aprecio por su trabajo al frente de la Cancillería.

Bienvenido.

Le voy a pedir, primeramente, que haga uso de la palabra el canciller y posteriormente, le pediré a Héctor Vasconcelos conduzca y modere la reunión.

Adelante, canciller.

SECRETARIO MARCELO EBRARD CASAUBÓN: Gracias, senador Ricardo Monreal.

Senadoras, senadores. Queridas amigas y amigos, muchas gracias por sus palabras, senador.

Inicio este comentario, esta reflexión sobre la política exterior de México, agradeciéndoles la oportunidad que me dan de compartir en dónde estamos y cuál es la agenda que sigue o que tendremos en los próximos meses por delante respecto a la política exterior de México.

Diría yo, en primer lugar, que en el quehacer de la política exterior mexicana, como ustedes saben, un punto primordial tiene que ver con la relación con los Estados Unidos, como aquí se mencionó acertadamente; entonces, ¿en qué punto estamos en esa relación bilateral?

Ha habido muchos años, la tendencia en nuestro país, de suponer, y eso cambió a partir de 2018, que cualquier diferencia que exista con Estados Unidos pone en riesgo la política bilateral o la relación bilateral en su conjunto.

Entonces lo primero que hay que considerar es que la estrategia que ha seguido México es evitar que eso ocurra. Es decir, cada uno de los temas que tenemos debe tener un espacio de resolución porque las diferencias van a estar ahí sí o sí, todo el tiempo, es imposible que los intereses de México y de Estados Unidos sean los mismos en todas las materias al mismo tiempo; salvo que renunciáramos a cualquier independencia.

Siempre va haber elementos de diferencia, sean comerciales, sea la política de migración, sean las posiciones internacionales de México respecto a otros conflictos en el mundo o cómo votamos en muchos temas en las Naciones Unidas.

Entonces la pregunta es, ¿qué es lo que tenemos que hacer para que la relación con Estados Unidos sea la mejor posible y al mismo tiempo podamos defender nuestros puntos de vista, que son distintos en muchos casos?

También tenemos diferencia en intereses comerciales, quizá en Estados Unidos a una parte importante le interesaría que México no tenga tanta inversión de sus empresas. A otros les gustaría que no estuvieran aquí las empresas norteamericanas, que estuvieran en los Estados Unidos o que México ya casi no tuviese una política energética propia, inclusive debo decirles que cuando fue el tramo final de la negociación del Tratado de Libre Comercio, su actualización, que nos tocó la fase final entre la elección y la toma de protesta del presidente, ya prácticamente la fase final; había todo un capítulo respecto a energía, que nos conduciría a una especie de mercado común energético en donde México tendría que haber de plano, renunciado a cualquier margen de autonomía en materia energética.

Y así mismo, quizá en otras materias, derivadas de ese capítulo. Bueno, ese capítulo se sacó, se quitó, esa fue una negociación muy compleja en su momento, casi imposible y se llevó a cabo.

El presidente fue muy firme en ese sentido, de decir: de ninguna manera admitiría yo ningún tipo de capítulo que restrinja las opciones de México en materia de energía, en general.

Bien, entonces dicho esto, les diría yo, la estrategia de México ha sido, después de la firma del Tratado, desarrollar todos los mecanismos previsibles que permitan hacer compartimentos distintos en una relación que, como ya expliqué, es muy amplia, es casi una obra de arquitectura o de ingeniería, como se quiera ver, respecto a cómo vas a manejar la relación más compleja del mundo; ¿por qué es la más compleja del mundo? Porque tenemos 3 mil kilómetros de frontera, porque somos el socio principal de Estados Unidos y porque nuestras diferencias en lengua, en perspectiva política son importantes, lo han sido así toda nuestra historia.

Entonces, la estrategia de México ha sido construir esos espacios que permitan reducir la asimetría, aumentar la previsibilidad de los acontecimientos y, en su caso, cuando haya diferencias, establecer métodos arbitrales, que lo que hacen es reducir la asimetría; porque si no los hubiese, si no tuviésemos paneles, entonces nos imponen una batería de aranceles y ahora estaríamos negociando en Estados Unidos ya con los aranceles impuestos, no habría límite.

Esto lo digo porque veo que en algunos de los comentarios sobre el tema de los paneles hay contenidos negativos. Es decir, no se está asumiendo que el panel es la mejor vía de resolución de conflictos entre México y Estados Unidos.

Como lo ha sido en el pasado en la Organización Mundial del Comercio, ¿eh? México ha presentado y ganado paneles importantes, por ejemplo, sobre el acero. Por cierto, lo ganó Jesús Seade.

¿Cuál es el estado que guarda la relación con Estados Unidos? Yo diría que es una relación muy buena, porque entendemos que tenemos una coincidencia estratégica. ¿Cuál es, cuál sería? Pues lo que el Presidente López Obrador planteó en Washington, en pocas palabras, la economía mexicana y la economía norteamericana tenderán a integrarse todavía más en los próximos años.

La economía mexicana y la economía norteamericana, también la canadiense, se van a integrar más.

¿En razón de qué? En razón de una nueva realidad geopolítica y geoeconómica, que es la competencia entre regiones del mundo, que quizá no se daba hace algunos años.

Habría que prever que los incentivos para invertir en México van a crecer muchísimo este año, el año que viene y los próximos 10-15 años, mucho; y de hecho, está ocurriendo y va a ocurrir cada vez a mayor escala.

Si eso es así, entonces, ¿cómo podemos manejar la relación con Estados Unidos para mantener nuestra autonomía relativa?

Hoy en día, México tiene la plataforma manufacturera más grande de América Latina y el Caribe, por mucho, y eso se va a acentuar.

Les pongo un ejemplo breve. La industria aeroespacial en México está creciendo a un ritmo de 26 por ciento por cada tres años. México hoy es el número 14 del mundo, pero vamos a ser cuando termine este Gobierno el número 12, y para el término de la década, vamos a hacer probablemente el nueve o quizá el ocho.

Esto significa miles de millones de dólares y significa muchísimos miles de empleos muy bien pagados y un desarrollo de valor de la economía en México que está en curso.

Bien, decía yo, eso va a seguir pasando.

Ahora tenemos el Diálogo Económico de Alto Nivel, que mencionó el senador Monreal.

¿Qué es el Diálogo Económico de Alto Nivel? ¿Por qué lo presiden las cancillerías? ¿Por qué no es una reunión de comercio?

Pues porque se deriva ese diálogo, su reactivación, de un acuerdo del Presidente López Obrador con el Presidente Biden para que lo que acabo de describir se haga aceleradamente en las áreas que sí nos interesan.

¿Cuáles áreas sí nos interesan? Semiconductores, que en México no hacemos. Esos el año que entra vamos a empezar en México a hacer semiconductores, cada vez a mayor escala. Los semiconductores se fueron a fines de los 90’s, la opción México no se consideró, se fueron allá; bueno, de eso vamos a tener otra realidad el año entrante, porque eso lo propuso el Presidente López Obrador en la reunión, allá en Washington.

O el equipo médico. Dice el Presidente López Obrador, ¿cómo es posible que no podamos hacer un ventilador en toda Norteamérica? No sé si se acuerden cuando fue la pandemia, lo que vivimos con los famosos ventiladores, una cosa tremenda, Jaime lo vivió de gobernador con nosotros allá en Relaciones Exteriores. No teníamos ventiladores. Bueno, hay que hacer equipo médico, entonces hay que ponernos de acuerdo sobre eso.

Electromovilidad, el otro tema que vamos a ver en el diálogo económico de alto nivel, ¿por qué? Pues California acaba de decidir que en 2035 no se puede vender un vehículo a gasolina o diesel en el estado de California; el consumidor número uno de vehículos en Estados Unidos.

Entonces, marchas forzadas, 2035 adiós vehículos a gasolina en el estado de California, por consiguiente, en muchos otros estados. O sea, se está recortando el tiempo.

Para hacer electromovilidad, necesitamos hacer baterías; para hacer baterías necesitas tener minerales, litio, ya se mencionó, es visionaria esa iniciativa de que México explore y maneje sus recursos en torno al litio.

Y vamos a necesitar otros minerales que no los hemos desarrollado y probablemente en los océanos o en otros países del mundo lo tengamos que conseguir.

Estados Unidos, por cierto, junto con Canadá, está haciendo una exploración en el Pacífico a gran escala, que tenemos que tener muy a la vista.

Bueno, esos temas son los que se van a tratar en el Diálogo Económico de Alto Nivel, que se llevará a cabo el 12 de septiembre.

Oigan, ¿pero cómo pueden hacer su Diálogo Económico de Alto Nivel con todos esos contenidos tan importantes y al mismo tiempo la Cumbre de las Américas decir: No estamos de acuerdo con que no inviten a algunos países? ¿Por qué México puede hacer eso? ¿Por qué otros países no pueden?

Yo diría, bueno, una primera respuesta es, en el caso de la Cumbre de las Américas a mí me tocó exponer en el Pleno, en Los Ángeles, la posición de México; que, en esencia -no se las voy a repetir porque ustedes ya siguieron esa información- en esencia es: México no acepta en esa Cumbre de las Américas que un país decida unilateralmente quién asiste y quién no asiste. Todos los países de América deben de asistir, y si tienes algo qué decirle a algún país, se lo dices ahí.

Es cuando hicimos la Cumbre de la CELAC, que vinieron todos los países, vinieron los Jefes de Estado, estuvo Maduro, de Venezuela, junto a Luis de la Calle, de Uruguay, tuvieron ahí una discusión por cierto, pero vinieron todos. México no dijo: “Tú no puedes venir”. Vienen todos los países de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe.

Eso fue lo que dijimos allá en la Cumbre de las Américas, con todo respeto y dijimos, esto se lleva discutiendo cuando menos desde el 2012, que se había llegado a un acuerdo en Cartagena y luego se ratificó de que no se excluyera a nadie; y 10 años después se volvió a excluir, pues lo teníamos que decir.

Y eso, independientemente de cuál sea tu posición sobre cada país, lo que se está discutiendo es el principio de que nadie puede ser excluido, y menos porque un país lo decida.

¿Por qué podemos decir eso y al mismo tiempo tener el Diálogo Económico de Alto Nivel? Bueno, primero porque tenemos una coincidencia que ya expliqué, estratégica hacia el futuro, que es la seguridad de nuestras cadenas de valor; esa es una ventaja para México, estar en donde estamos. De acuerdo, pero esa no es explicación suficiente.

Lo puedes hacer también porque tu peso político y el respaldo que tiene el Gobierno en su propio país, que es donde dice el Presidente López Obrador: “La política interior determina la política exterior”. Muchos lo criticaron por decir eso.

¿A qué se refería? Pues la explicación de por qué puedes tener las dos cosas que acabo de explicar, es porque tienes un Gobierno que tiene un respaldo muy amplio.

Si no lo tuvieses, no tendrías fuerza para hacer las dos cosas, entonces se tendría que optar por algo similar a lo que vimos hasta 2018, el acto vergonzoso de invitar a un candidato a la presidencia de Estados Unidos a Palacio Nacional a insultar a México, delante del Presidente de México. Eso nunca lo habíamos visto en la historia, pero es la lógica extrema a la que te lleva cuando no tienes la fuerza interior, no tienes el respaldo de la sociedad para tomar tus decisiones.

Bueno, ¿en qué vamos con los Estados Unidos y en qué estamos ahora? Bueno, tenemos un diferendo sobre reglas de origen, cómo se interpretan las reglas de origen para la industria automotriz.

Alguien dirá: ¿Y por qué defendemos a la industria automotriz? Bueno, porque tenemos un millón 200 mil empleos directos, y somos el sexto productor mundial de vehículos automotores, tendencia a ser el quinto pronto. ¿Por qué? Porque en México están las plantas más productivas de muchas de las empresas.

Por ejemplo, de Ford, la número uno y la número dos, plantas mundiales es Cuautitlán, Izcalli, y Hermosillo. Cuautitlán, que fui porque me invitaron, entre otras cosas porque quería yo ver el vehículo que hicieron las trabajadoras mexicanas. Fue su iniciativa, hicieron un vehículo 100 por ciento, por primera vez en la historia, fabricado por mujeres. Le ha dado la vuelta al mundo y es de aquí de México. Esa planta esa la más productiva de todas.

Y así sucesivamente. La industria automotriz en México es un gran motor de desarrollo y tenemos los estándares de productividad más altos del mundo, no es poca cosa, ¿eh?, lo que estamos diciendo.

Todos los temas que les acabo de comentar, hay una diferencia sobre reglas de origen que es cómo las interpretas, porque si las interpretas de una cierta forma, puedes perjudicar a toda la industria que está en México, ser un desincentivo hacia el futuro.

México lo planteó, ¿cómo se plantea esta diferencia? Pues por la vía correcta prevista en el Tratado, que es, la Secretaría de Economía lo presenta a USTR, que dirige la embajadora Tai, y después se hace un proceso de diálogos, de consultas.

El incentivo es tratar de llegar a un acuerdo porque el panel no te conviene porque es un juego suma cero; en pocas palabras, en la sabiduría mexicana más vale un mal arreglo que un buen pleito; en esencia, es lo que dice esta forma de tener paneles como última instancia, si no llegas a un acuerdo.

Yo diría que la relación que veo o que les puedo informar o compartir, es una relación bastante buena, pero tenemos diferencias y cada quien defiende sus puntos de vista y hay un método previsible para resolverlo.

El otro día decía el embajador de Estados Unidos, es tiempo de resultados en seguridad. Bueno, yo le recordé, hay un Entendimiento Bicentenario, que es un documento que se negoció entre el Departamento de Estado y la Cancillería, con la presencia de las áreas de seguridad, siguiendo la misma lógica que acabo de hablar, que es cuál, ¿cuáles son los objetivos de que eres responsable tú Estados Unidos y de qué soy responsable yo México? Porque tú eres corresponsable de los problemas que hay.

Y en ese Entendimiento Bicentenario se aprobó un plan de acción 2022, 2023, 2024. Por ejemplo, Estados Unidos acepta contribuir con México para reducir el tráfico ilícito de armas a México, es una obligación de Estados Unidos.

La pregunta que yo le haría y le voy a hacer al señor embajador ahora que nos veamos, es: ¿Cuánto ha reducido Estados Unidos el tráfico ilegal de armas? Porque eso está en tu programa; programa que los dos países hicimos juntos y que además tenemos la obligación de informar.

Por cierto, el próximo informe por parte de México se da el día 5 de septiembre. Vamos a decir qué hemos logrado de lo que nos toca, y Estados Unidos tiene que decir qué ha logrado de lo que a ellos les toca.

Otro objetivo: Reducir el consumo de estupefacientes en Estados Unidos.

Otro objetivo: Dificultar el envío de recursos de Estados Unidos, donde se hace la venta, la última milla; o sea, donde se hace la venta importante, ese cashflow reducirlo hacia México, porque nos crea problemas en México. Eso está en el plan.

Ahora ya no podemos hablar de que México no cumplió, ahora vas a tener que informar tú qué es lo que estás haciendo tú, porque en el plan de acción, que con mucho gusto está a su disposición, ahí está establecido lo que estoy hablando ahora; y, por ende, los resultados son binacionales.

Ya no son los resultados, Estados Unidos va a valorar y evaluar a México. Ahora, los dos países vamos a tener que entregar nuestros resultados y ser evaluados por ambos países. Y qué bueno, yo celebro que así sea, es un gran logro, eso no existía.

Otra vez, la unilateralidad no nos conviene, son, todo tiene que ser previsible, plan de acción, acciones que te tocan a ti, que me tocan a mí y cómo se miden y cómo informamos a los dos países y a los dos congresos.

Por ejemplo, el día 5 tendremos que enviarles a ustedes el Informe de qué cosa fue lo que se hizo en el Entendimiento Bicentenario, que le corresponde a México, y qué nos informó Estados Unidos que hizo.

Por ejemplo, México presentó una demanda por armas a la industria de armamento. Primera vez que se hace ante una corte en los Estados Unidos.

Esto es muy relevante porque es el Gobierno de México presentando un recurso contra industrias norteamericanas: Smith & Wesson, Colt, quién no conoce las pistolas Colt famosas. ¿Se acuerdan las películas del oeste?

Bueno. Entonces, todas esas empresas, es el Gobierno de México que está presentando una demanda ante una Corte en Estados Unidos, y esto es respetando su ámbito competencial porque no pretendemos cambiar una ley de Estados Unidos, lo que pretendemos hacer es: ustedes están produciendo armas que están dirigidas de antemano al segmento pro narco, o de plano involucraron acciones de narcotráfico, ustedes lo saben, están produciendo armas similares a las que aparecen en narco series, o que se exhiben cuando hay detenciones; inclusive puedes mandar hacer tus inscripciones.

Entonces, lo que estamos diciendo es, a la Corte de Massachusetts, esto se llama en tu legislación negligencia, es el equivalente, porque el productor, por el hecho de crear, fabricar ese producto, está creando un daño a terceros, nada más que esas terceras y terceros son ciudadanas mexicanas, mexicanos en nuestro territorio.

Entonces va a ser un caso muy interesante. Desde luego que en la Cancillería se discutió mucho si se hacía o no porque la personalidad jurídica es el Gobierno de México. Entonces, vamos a ver que sucede en la Corte de Massachusetts.

Pero bueno, ¿esto quiere decir que se crea una tensión con Estados Unidos? No.

¿Por qué? Porque no estamos demandando al gobierno de Estados Unidos, estamos demandando a la industria que produce esas armas.

Entonces, simplemente decir, en casi todos los campos migración es otro. Por primera vez, pasó un poco inadvertido aquí en México, pero por primera vez, que yo sepa, en documento oficiales, derivados de entrevistas o reuniones entre los presidentes de ambos países, se habla en el comunicado de la reciente visita a Washington del presidente López Obrador, se habla en el comunicado de movilidad laboral. Es otra cosa.

Es decir, ante lo que estamos es ante un gran fenómeno de movilidad laboral. Pues vamos a hablar de eso, vamos a llamarle por su nombre. No migración indocumentada; es movilidad laboral. Porque en la movilidad laboral tienen que ver los trabajadores, las trabajadoras, pero tienen que ver los empleadores y las instancias que están en medio, es decir, los gobiernos.

Entonces, nosotros estamos avanzando en la agenda de que regular la movilidad laboral sobre otras bases y no el modelo del siglo anterior.

Estados Unidos crece al .4 por ciento su demografía, compañeras y compañeros; .4. El año 2021 creció al .1. Es el más bajo en la historia.

¿Esto significa qué cosa? Significa que el número de personas que necesitas para que la economía de los Estados Unidos funcione, va a crecer cada año, te guste o no te guste; es una realidad demográfica.

Claro que puedes mantener todo como está, pero ese mantenerlo como está es un sufrimiento inmenso para millones de personas, es privación de derechos para miles o quizá millones de personas, y eso es incompatible con la carta de derechos humanos a la que estamos obligados todo el hemisferio del que formamos parte.

Entonces, ¿a qué vamos? Pues regulemos la movilidad laboral.

México también lo tendrá que hacer en su momento, lo más pronto que se pueda. Es movilidad laboral.

De hecho, nosotros estamos ahora con el Instituto Mexicano del Seguro Social registrando a las y los trabajadores de Centroamérica en nuestro territorio, porque no podemos pedir una cosa afuera y hacer otra cosa adentro, y se está haciendo ahorita ya eso que les estoy comentando, con el apoyo del Instituto Mexicano del Seguro Social; indicaciones del Presidente.

Bien. entonces, movilidad laboral. Ahí está también ya puesto el tema. Y así.

Ahora, el Alto Golfo de California, tenemos un problema muy serio con el Río Colorado, pero muy serio. Tenemos un problema de que no tenemos suficiente agua; pero la otra es que está cambiando la salinidad del Alto Golfo, porque al llegar menos agua se modifica y eso afecta todas las especies del acuario del mundo. Entonces estamos trabajando sobre ese tema hoy.

Y así puedo mencionarles muchos, muchos otros casos.

Entonces yo diría, en síntesis, tenemos una muy buena relación pero que nadie se llame a que va a haber una crisis en nuestra relación con Estados Unidos porque tenemos una diferencia en algo, porque el supuesto de eso quiere decir que entonces no tengamos diferencias y hagamos todo lo que a Estados Unidos le pueda complacer. Eso nunca lo haremos. Es una falacia.

Entonces, si en el último de los casos llegamos a un panel, pues llegaremos a un panel, pero todos los procedimientos están hechos para que no lleguemos, para que encontremos un diálogo antes de. Lo importante es que ahora tenemos la posibilidad de hacerlo. Antes, como ya les dije, pues sería la imposición de aranceles.

Y así están las reglas de origen, está el tema de las empresas norteamericanas que se sienten en condiciones desventajosas en materia de energía, tendrán que demostrarlo por qué es desventajoso, en qué es desventajoso, hay que demostrar qué daños tienes, si es que los tienes. No es tan sencillo, pero tiene manera de resolverse.

Y lo mismo diría yo en el campo de la seguridad alimentaria de México, de Estados Unidos y de Canadá. No necesariamente estamos de acuerdo en todo.

Nos han parado los envíos de tomate porque hay presiones del estado de Florida, o nos paran el envío de uvas. Entonces, lo que estamos tratando de hacer es reducir la incertidumbre otra vez. Todo lo que reduzca la incertidumbre, o lo impredecible, o la unilateralidad le ayuda a México, y ese debe ser nuestro objetivo siempre, siempre, siempre, todo el tiempo.

Entonces, yo diría, muy buena relación y creo que claramente el Gobierno de México ha logrado tener sus prioridades o fijar sus criterios.

Otro ejemplo: lo de Venezuela. ¿Cuál fue el país que dijo que no, que estaba mal la estrategia de reconocer a Guaidó y tratar de dar un golpe de Estado?: México; 2019, ahí está en los documentos. En Montevideo, en la reunión con la Unión Europea, por ejemplo. Que además no nos querían dejar entrar a la reunión.

Uruguay fue el que dijo “bueno, si México no entra, yo tampoco”. ¿Saben por qué no nos dejaban entrar? Porque no admitimos ser grupo de apoyo u observador del equipo que había formado la Unión Europea. Les decimos: “¿Y yo por qué tengo que aceptar eso si es la región? Más bien tendría que ser al revés, ¿no? Los países de América Latina somos los titulares y ustedes son observadores”.

Bueno, esa diferencia se resolvió. ¿Pero qué dijimos entonces? Hay que llegar a un acuerdo de las y los venezolanos, hay que renunciar al intervencionismo. Es un error estratégico querer derribar un régimen. Es más, es escandaloso que estén hablando de eso en el Siglo XXI. Así fue la posición de México.

¿En dónde estamos hoy? Pues que teníamos razón. Que no hay ya negociaciones, ¿o serán próximamente entre el gobierno de Venezuela y el gobierno de Estados Unidos? ¿No se va a reanudar la producción de petróleo? ¿O se va a incrementar? Entonces, teníamos razón.

Entonces, hemos logrado mantener nuestros puntos de vista. México es muy crítico de la Organización de Estados Americanos. La Organización de Estados Americanos es una policía electoral hoy. Promovieron un golpe de Estado en Bolivia, está documentado lo que les acabo de decir; él está auditado, es increíble que siga el señor Almagro ahí, me parece escandaloso, porque está auditado lo que hicieron, prestarse para dar un golpe de Estado.

Entonces, México ha sido extremadamente crítico y va a seguir siendo muy crítico de una Organización que no sirve absolutamente para nada, salvo para eso que acabo de decir: intervenir en otros países.

Pasamos toda la crisis de la pandemia. ¿Escucharon ustedes al Secretario General de la OEA abogar por América Latina y el Caribe para que tuviéramos vacunas?

¿Alguna vez se refirió a que estaba preocupado porque estaban muriendo cientos o miles de personas en nuestra Región?

¿Alguna vez demandó, exigió, acompañó? ¡No!

Pues claro que vamos a seguir siendo muy críticos. No debería estar ahí ese señor. Quisiéramos tener otra Organización.

Dice el Presidente: hagamos una Organización más elaborada, que Estados Unidos deje atrás por siempre esta intención de decirle a los países de la Región qué tienen que hacer. Es lo que él ha propuesto.

Vamos a ver qué podemos alcanzar, pero yo no pienso que debamos de ser pesimistas, igual lo podemos lograr. Lo peor es no decirlo, no intentarlo. Ahí va. Hay muchos países que nos han dicho “tiene razón tu Presidente sobre esto; otra forma de organizarse”.

Bueno. El resto del mundo. No todo es la relación con Estados Unidos, es muy importante pero no es la única, ni debe serlo.

América Latina y el Caribe hemos regresado, hemos visto al sur, ahí está lo que se hizo en Bolivia. México fue determinante también para que la comunidad de estados latinos, americanos y caribeños salga adelante y no se abandone.

México ha sido solidario con Cuba en todo lo que ha pasado ahora, en su crisis, pero también con otros países, también con Haití. Somos un factor constructivo importante.

Ahora, México preside la Alianza del Pacífico. Como ustedes saben, ya está Colombia, Perú, Chile, México, ahora Singapur; próximo país que va a entrar es Ecuador, en la Región, y ya se iniciaron pláticas con Corea del Sur. Entonces, esa Alianza del Pacífico va a crecer cada vez más.

La Unión Europea. Bueno, estamos muy cerca. Ahora estamos por esperar su definición ahí, y gracias al Senado de la República, a la presidenta Sánchez Cordero, que estuvo por allá, acompañada de varias senadoras y senadores que nos hicieron favor de apoyarnos para el tema de que ya salga adelante la modernización del Acuerdo con la Unión Europea; que es una decisión esencialmente de ellos, porque México ya terminó todo ese proceso de negociación, ya hace tiempo.

Entonces, esperamos muy pronto tener buenas noticias sobre ello, aceleradas, por el conflicto que hay ahora por la invasión rusa a Ucrania.

La posición de México sobre ese tema, constructiva otra vez. Apoyamos la negociación para que puedan salir los granos, México propuso, junto con Francia y otros países, se votó en la Asamblea General de la ONU, los corredores humanitarios.

Mantenemos el diálogo y la comunicación con las partes, entonces México ha seguido su tradición y su política de participación como un factor positivo para encontrar una solución pacífica.

Hoy en el mundo hay 16 conflictos, graves, y en todos México ha guardado posiciones de esa naturaleza, y lo seguiremos haciendo.

El presidente ha propuesto atender en la Organización de las Naciones Unidas, el basamento de su legitimidad, que es: somos la primera generación que tiene la posibilidad de evitar, por los recursos que tenemos, la miseria o dicho de otro modo, la pobreza extrema en el mundo.

Hay casi mil millones de personas que viven con menos de 4 dólares al día, entonces el presidente les propuso una acción para impedir que eso siga ocurriendo, porque hay los recursos para impedirlo. Hace más tiempo no sería factible: hoy es factible, es el 4 por ciento de los ingresos de las principales mil corporaciones del mundo, 4 por ciento, y se podría cambiar esa circunstancia.

El 0.2 por ciento del Producto Interno Bruto de los países del G-20; el 4 por ciento de los 50 multibillonarios del mundo. Es lo que se necesitaría.

¿Por qué no lo hacemos? ¿Qué no debería hacerse para que entonces la Organización de las Naciones Unidas tuviera ese basamento, porque en la medida en que hay desigualdades tan grandes, hay conflictos muy graves?

Bueno, pues aunque ustedes no lo crean, 81 países a esta fecha, nos han dicho que les interesa apoyar esa propuesta. Probablemente van a ser más en las próximas semanas.

Es una voz que se escucha, es lo que les quiero decir, la voz de México. Es una voz que plantea cosas que no son las tradicionales, no son los discursos de siempre, no hay ese conformismo y eso me da gusto podérselos compartir; debemos estar contentas, contentos, orgullosos de eso.

Bien, tenemos muy buenas relaciones con China. China nos ayudó mucho en la pandemia, no olvidarlo, no lo olvidaremos jamás, hicieron un puente aéreo para ayudar a México: 250 aviones. Se dice fácil, pero es un esfuerzo tremendo.

Trajimos de todo: cubrebocas, vacunas, equipos médicos, todo lo que se necesitaba. Entonces, tenemos muy buena relación y también nos respetamos mutuamente, porque no coincidimos en todo, no debe ser el supuesto básico, ¿verdad? Nos respetamos.

En algunas cosas competimos, en otras nos complementamos. Pero lo esencial, nos respetamos, dos grandes civilizaciones antiguas.

La India. Bueno, estamos por abrir el Consulado en Mumbai. México no tenía Consulado ahí; no es un Consulado de enfoque protección, porque no hay una comunidad mexicana muy grande, es un Consulado enfoque promoción, porque ahí está la base de las empresas y la economía de la India.

Es un país que crece al 8 por ciento anual, su economía. Es un país en donde México tiene que estar y por eso vamos a abrir ese Consulado; ahora que visitamos la India, llevamos a las startups de México, llevamos las empresas unicornio de México. México tiene nueve unicornios, 40 startups que se han creado bajo el gobierno del presidente López Obrador.

Esto es importante, porque vamos ya al décimo unicornio, por cierto, dirigido por empresarias; primer unicornio dirigido por mujeres en México. Y la velocidad con la que están creando estas nuevas empresas y unicornios, nos habla de un dinamismo; esto ya vale más de 3.2 billones de dólares, todas estas empresas.

Las invitamos, por indicaciones del Presidente, a la Cancillería y las estamos invitando a los viajes al exterior para ayudarles en su desarrollo; pero esto te habla de cuál es el ambiente de innovación, de inversión que hay en México. Esa es la realidad. Si no hubiera confianza, no habría 40 startups y menos 10 unicornios, ¿verdad?

Decirles que en la India estamos presentes; también en Medio Oriente, especialmente en los países que tienen los mayores fondos de inversión, o sea, ahora con Qatar estamos trabajando para el mundial de fútbol, pero tienen uno de los fondos de inversión más grandes del mundo, que no está en México, no tiene inversión en México, salvo indirectamente porque lo hacen vía Nueva York.

Lo mismo pasa con Kuwait, lo mismo pasa con Emiratos que, por cierto, es un gran hob logístico y de productos, y así sucesivamente.

Y les diría que también estamos trabajando con Corea, que tiene una de las industrias más importantes farmacéuticas, pero también para electromovilidad. Fui a invitarlos para, México no produce baterías hoy; no tenemos la red que necesitamos para hacer lo que se llama el storage o la acumulación de energía intermitente.

O sea, necesitas acumular la energía solar para quitarle la intermitencia, entonces están trabajando en eso; igual para otro tipo de energías. Entonces ya los invitamos, vamos a ver si podemos tener éxito, ojalá que sí. Tenemos que fabricar baterías lo más rápido posible, por eso estamos buscando ese tipo de socios.

Y también decirles que, bueno, ver al sur, estamos muy cerca de Bolivia, de varios países de América Latina, pero con Bolivia somos los dos países que vamos a tener empresa estatal de litio. Bolivia va a empezar su producción de litio el año que entra, estiman, fui a visitar su planta, 4 mil metros de altura.

Te sirven la sopa ahí en la planta, con una roca en medio, volcánica, y está hirviendo la sopa y les digo: “¿Por qué le ponen esa piedrita?” Dicen: “Porque se le va a enfriar en lo que me pregunta usted, por el frío que hace”. Entonces, en lo que te tomas la sopa, ya se enfrió. Es muy interesante, es lo que comen los mineros allá arriba.

Es un salar y el litio que puedes sacar de ahí es más caro que en otros países, pero tienen un recurso muy grande. Hoy por hoy, probablemente sea la mitad del litio posible a conseguir en, en cuando menos en el hemisferio occidental.

Van a empezar a producir 15 mil toneladas y su meta es producir 100 mil toneladas al año.

Para que ustedes se den una idea, el litio hace cuatro años valía 5 mil 500 dólares la tonelada, cuatro o cinco años; ahora está a 80 mil dólares la tonelada y va hacia arriba, pues obvio por lo que acabo de referir, que se está acelerando la electromovilidad.

Bueno, vamos a estar trabajando con Bolivia nuestras empresas estatales. Ellos ya llevan un camino avanzado y México, como ustedes saben, ya también tiene su empresa, y es algo muy importante.

Pronto tendremos aquí sus vehículos eléctricos, que les recomiendo, es un vehículo muy pequeño, muy bien hecho por una empresa muy joven de Bolivia y otra empresa de México, que es de las pocas que hace motores eléctricos en Latinoamérica, que normalmente hacía y hace motores muy importantes para Pemex, CFE, en fin, y ahora están haciendo los motores de los vehículos.

Bueno, ese es un panorama, sólo mencionar, para concluir, la prioridad que ha tenido para México la recuperación de nuestro patrimonio histórico y cultural.

Si hay otro rasgo muy importante de toda la política exterior de México, ha sido ese.

Ayer todavía me reportaba el cónsul en Nueva York, la recuperación de una máscara olmeca, tiene más de mil años de antigüedad, vale una fortuna y la vamos a reintegrar a nuestro Museo Nacional de Antropología.

Y lo estamos logrando por tres vías, rápidamente lo describo: Uno, el cambio de criterios de los gobiernos.

Ahí Italia nos ayudó mucho por una razón, el criterio europeo tradicional era: “Demuéstrame que es ilegal la pieza”; y los carabineri de Italia dijeron al revés: “Demuéstrame tú que la vas a subastar, que tiene origen legal. Y si no tiene origen legal, te la voy a confiscar”. Es un cambio revolucionario.

Y eso ha permitido recuperaciones muy importantes en Europa; todavía hay países que se resisten, pero nos abrieron una puerta enorme, no la teníamos, hay que reconocer a Italia; carabinieri de Italia, maravilloso. Y, además, el titular de esto, es un gran admirador de la civilización mexicana, gran admirador.

Entonces, dicen: “nosotros estamos con ustedes, como si fueran piezas italianas, porque también estamos en esa lucha”. Ya se imaginan Francia, ¿no?, que tiene todo el Louvre lleno de piezas de Italia y así sucesivamente. Entonces, hemos encontrado mucha solidaridad por parte de los italianos.

Y ahora también se abre paso esto en Estados Unidos. Fiscal de Distrito de Nueva York, dice: “si tú no me demuestras el origen lícito, te confisco la pieza porque es robada”. Y así recuperamos textos del Siglo XVI. Textos de Hernán Cortés. Vamos a recuperar un códice. Son incunables para el patrimonio histórico de México. Entonces, eso nos ha sido mucho muy importante.

Y decirles también, para cerrar, que nuestra política exterior feminista ha ido creciendo en peso y en impacto en todo el mundo. Hemos tomado muchas iniciativas, muchas medidas para promover que; ¿por qué les digo esto?

Porque si ustedes van al conjunto del mundo, los países que tenemos un compromiso con la igualdad de género somos la minoría, pero no además no cualquier minoría, somos la minoría absoluta.

Entonces, tener una política exterior feminista es una acción política afirmativa en la dimensión internacional porque cuestionas de saque a todos los países que no reconocen la igualdad de género como un elemento sustantivo.

Alguien me dirá: “oye, pero qué atrevidos”. Bueno, pues es una creencia esencial de la política exterior, nuestra, de este Gobierno, y es la forma de echarlo a andar de poder lograr avances significativos.

Todavía, en la Resolución del G-20, en la que acabo de estar en Bali, hubo un grupo de países que querían sacar el término Igualdad de Género de la Declaración, en el G-20. Fue uno de los debates principales.

O sea, es tan pertinente lo que estoy diciendo que nos hemos convertido en un ariete para impedir esos retrocesos en el ámbito internacional, porque no lo quieren eliminar. No digo países para no ofender.

Pero un país decía “es que estamos en contra de la ideología de género”. Esa fue su tesis. Ya se imaginarán el debate que hicimos. Dijimos: “Ah, bueno. Si tú quitas esa palabra nosotros nos retiramos de la Declaración. Y todas las declaraciones son por consenso”. Entonces, sería el primer G-20, en Indonesia, en donde habría una ruptura de ese calibre, ¿no?

Claro que hay otros temas apremiantes. Estaba la discusión de si vamos a invitar a Rusia o no. Pues tenemos que invitar a todos; ya se había resuelto ese debate. Pero el siguiente es el género.

Entonces, ya logramos impedir eso, pero ahora en la Cumbre que viene de G-20, pues va a ser un tema primordial que México va a insistir, igual que la movilidad laboral y otros temas que ya he comentado aquí, pero de manera muy señalada ese porque estamos en minoría.

El grueso de los países del mundo, no reconocen los derechos de género, ni siquiera puedes hablar de género. Es la realidad, ¿eh?, la que estamos viviendo.

Senado de la República
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